Respaldo creciente a la discusión de una ley de fusiones y adquisiciones.,El anuncio del congresista Yonhy Lescano, vocero de Acción Popular, de que su bancada presentará en breve un proyecto de ley para regular las fusiones y adquisiciones en defensa de la libre competencia, el mercado y los consumidores, ha motivado una movilización en varios sectores del Estado y de las empresas que han concluido legitimando la iniciativa. Extrañamente Indecopi, cuya razón de ser hacía presumir que debería respaldar esa iniciativa o prepararse para hacerla suya, ha reaccionado en un sentido contrario descalificándose tempranamente para este debate. Sin que su máximo representante ofrezca una visión oficial del tema, ha preferido jugar entre bambalinas filtrando a la prensa increíbles argumentos contrarios, entre ellos el que afirma que si la ley se aprueba requeriría un incremento sustantivo en su presupuesto. Es claro que Indecopi ha cambiado de posición sobre este asunto desde la designación de su nuevo equipo dirigente. Desde el argumento presupuestario algunos estudios de abogados relacionados precisamente con empresas que podrían verse perjudicadas inicialmente con la regulación de las fusiones y adquisiciones han desarrollado una idea central opositora sumamente débil: Indecopi no está preparado para una ley de esta magnitud. Felizmente no han tenido éxito las iniciativas que pretenden bloquear como en el pasado el debate de este asunto fundamental. El congresista Jorge del Castillo con el respaldo de la bancada aprista presentó una moción que busca que se discuta una legislación que regule los procesos de fusiones y monopolios; y al respecto, la presidenta de la Comisión de Economía y vicepresidenta de la República, Mercedes Aráoz, ha anunciado la formación de un grupo de trabajo en el seno de su comisión con ese propósito. Finalmente, el premier Fernando Zavala ha aceptado la pertinencia de la aprobación de una norma de esa naturaleza teniendo en cuenta que una de las metas nacionales es que el Perú se integre a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). En el mismo sentido se ha pronunciado el Frente Amplio. Es probable que en el Ejecutivo aún tengan cabida las opiniones que se resisten incluso a una discusión de opciones. Recordemos que en mayo del 2014, una coalición de empresas lideradas por Comex llevó a cabo con éxito una campaña nacional orientada directamente al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y a la Comisión de Economía del Congreso para impedir que el dictamen de la ley propuesto por el legislador Jaime Delgado prospere. Esta vez como entonces los argumentos contrarios son pobres y forzados. Uno de sus voceros ha reconocido a La República que en el Perú existen mercados concentrados pero sostiene al mismo tiempo la increíble teoría de que la concentración no impide la competencia. La dinámica de reclamar una discusión técnica del problema pero recurriendo a relatos ideológicos muy generales –insistiendo en que estamos ante una ofensiva intervencionista del Estado contra el mercado, cuando precisamente la idea es preservarlo– es inviable. El debate ya está aquí.