Diecinueve fórmulas de partidos o alianzas pretenden la inscripción., En fiel cumplimiento de una de las peores tradiciones nacionales, la de esperar a la hora nona, once fórmulas presidenciales solicitaron ser inscritas ante el Jurado Electoral de Lima Centro 1 el último día en que esta gestión era posible. Con las ocho que ya habían hecho el trámite suman en total 19. No se batió el récord de 1996, cuando hubo 23 inscripciones y quedaron 20 habilitadas, pero no es una cifra de la que debamos estar orgullosos. Si de eso se tratara Haití, que tuvo 27 candidatos en sus últimos comicios presidenciales, sería un modelo de democracia. Claro que no es una cifra definitiva, y toca al JEE de Lima Centro 1 examinar los expedientes recibidos, que deben incluir una solicitud firmada por los tres postulantes, el acta original de los comicios internos en que se eligieron a los candidatos a presidente y vicepresidentes, un ejemplar impreso del plan de gobierno y también un resumen de este y, lo último, pero no lo menor, las Hojas de Vida de los candidatos. Es en materia de Hojas de Vida en las que se registran algunas novedades –casi todas extraídas con fórceps al actual Congreso– que permiten un mayor control de las autoridades electorales y de la sociedad civil sobre lo que declaran los candidatos. Por ejemplo, esta vez existe la obligación de que consignen procesos pendientes y si han sido objeto de alguna sentencia condenatoria en firme contra ellos. También deben consignar con mayor exactitud a cuánto ascienden sus ingresos anuales y el número de bienes muebles e inmuebles que constituye su patrimonio. Desde este punto de vista, que tres de los candidatos omitan estas cifras constituye una situación que deberá ser evaluada por el JEE, pues incluso si se trata de rentistas o jubilados algo deben recibir y en ese caso están obligados a declararlo. También hay candidatos que declaran no poseer bien alguno, lo que significa que su patrimonio posiblemente está a nombre de terceros. No es algo ilícito, pero debieron hacer la aclaración del caso. Las autoridades electorales cuentan con tres días para evaluar el expediente de cada una de las planchas y decidir si se ha cumplido con las formalidades de ley. Si tal es el caso, el JEE publica una resolución en el diario oficial, con lo cual se abre el periodo de tachas, que dura dos días naturales. El ente electoral cuenta a su vez con tres días naturales para admitir o rechazar la tacha y su fallo es apelable ante el JNE. Si no se presentan tachas o se rechaza las existentes, entonces la fórmula presidencial queda inscrita. Hay que destacar que registrar información falsa u omitirla en la Hoja de Vida respecto a rentas o bienes recibe como sanción la exclusión del proceso y lo mismo sucede en el caso de omitir sentencias de condena firmes y por incumplimiento de obligaciones familiares. Esta sanción puede ser aplicada hasta 10 días antes de la elección. Es una novedad importante. Si tuviéramos que hacer caso de las encuestas, ya existen algunos candidatos presidenciales con opción y otros sin ella. Pero pocas impresiones más erradas, pues la experiencia indica que en los próximos 90 días de campaña pueden registrarse vaivenes sorpresivos y que nada está definido. Como se sabe, solo dos fórmulas pasarán a segunda vuelta. La sociedad civil debe estar atenta y evitar que los halcones intenten hacerse pasar por palomas, como previene un anuncio de La República.