Variante brasileña no es la única que debe buscarse en el Perú
Estudios. El último miércoles, 135 muestras de Arequipa fueron enviadas al INS para el secuenciamiento del genoma del virus y determinar qué variantes están circulando en la región. Recientemente, un equipo de la Universidad Cayetano, detectó una nueva variante que sería peruana.
Hasta ahora el incremento de casos y muertes por la COVID-19 en el Perú ha sido asociado a la rápida propagación de la variante brasileña (P.1), surgida en la ciudad de Manaos. El Instituto Nacional de Salud (INS) ha confirmado, a través de un estudio, que esta variante está presente en al menos 10 regiones del país: Piura, La Libertad, Loreto, Lima, Áncash, Ayacucho, Cusco, Madre de Dios, Ucayali y Huánuco.
Con este resultado, hay una alta probabilidad que también esté circulando en la región Arequipa, según el decano del Colegio Médico del Perú, Javier Gutiérrez y el director del Laboratorio de Biología Molecular de la UNSA, Javier Ballón Echegaray.
Sin embargo, este dato no puede ser confirmado científicamente hasta el momento, pues las muestras recién han sido enviadas al Instituto Nacional de Salud, el miércoles 21 de abril. Los resultados tardarán en llegar una semana.
Ballón explicó que el INS ha pedido muestras a todas las regiones. Arequipa envió 135 muestras, 100 por parte del Laboratorio de Referencia Regional a cargo del Ministerio de Salud y 35 del Laboratorio de Biología Molecular de la UNSA.
Otra variante
Pero según los especialistas, no solo es importante ir a la búsqueda de la variante brasileña, sino de otras que pudieran surgir en el país. Por eso remarcan la necesidad de hacer una verdadera vigilancia genómica para identificarlas. Solo así sabremos a qué nos estamos enfrentando.
Una reciente publicación hecha en Virological.org (foro de discusión para el análisis de los genomas de los virus) ha dado cuenta de lo que sería una variante que podría haber surgido en el Perú con características que serían similares a la variante brasileña. El estudio dice que se trata de un nuevo sublinaje dentro de la variante B.1.1.1 que se está expandiendo rápidamente en Perú y Chile.
El estudio ha sido realizado por científicos de la Universidad Cayetano Heredia, Universidad Nacional Mayor de San Marcos, el Instituto de Medicina Tropical Alexander Von Humboldt y Sanger, liderados por el biólogo Pablo Tsukayama.
Según el estudio, este sublinaje fue reportado en diciembre en Lima, y ahora representa el 47.6% de genomas que estudiaron de la capital, entre el 1 de enero y el 18 de marzo.
Vigilancia genómica
Conocer cómo está mutando el virus, es fundamental. El doctor Ballón explicó que hacer la vigilancia genómica resulta crucial para establecer medidas más concretas para contener el virus que cada día genera más contagios y muertes. Una medida, por ejemplo, sería establecer cuarentenas altamente focalizadas teniendo como base los resultados de la vigilancia. Lo enviado al INS es una muestra muy pequeña, no llega ni al 1% de la población infectada. Pero, al menos es un inicio, comentó Ballón.
Gutiérrez del Colegio Médico también coincide en que la muestra es pequeña, resultado del cual, solo se hace una inferencia estadística.
Pero, ¿por qué en el Perú no se está haciendo una vigilancia genómica? El especialista señala que se requiere un financiamiento para hacer la secuenciación del genoma del virus, ni basta con tener los laboratorios. Hacen falta los reactivos.
Se requiere más personal especializado
El decano del Colegio Médico, Javier Gutiérrez, apunta además que también se requiere personal capacitado para esta labor y si bien en Arequipa hay profesionales con dicho entrenamiento, hace falta en todo el Perú.
Vale recordar que la Universidad Peruana Cayetano Heredia tiene un convenio con la UNSA y la Universidad Rodríguez de Mendoza de Amazonas para realizar la vigilancia genómica, gracias a que ganaron un concurso en el Fondecyt. Por ahora, están esperando el desembolso de los recursos económicos para iniciar el proyecto.