La mañana de este martes 1 de noviembre, fiscalizadores de la Municipalidad Metropolitana de Lima intentaron desalojar a un grupo de comerciantes gastronómicos que ofertaban sus productos en el exterior del cementerio El Ángel, exactamente en la avenida Áncash, pese a que tenían autorización para operar. De acuerdo a los empresarios, pagaron un permiso de 180 soles a la comuna de El Agustino para realizar la actividad que inició el domingo 30 de octubre. “Nos prestamos plata para sacar adelante este negocio”, “No es primera vez (del funcionamiento de la feria), son como 50 años que trabajamos en este sector”, fueron algunas de las declaraciones de los afectados. Luego de unos minutos y de algunas conversaciones entre ambas autoridades distritales, los vendedores de comida lograron continuar con el comercio de sus productos. VIDEO: América TV
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