Rebagliati revela que Cueva no se operó ligamentos

El dictador triunfante

“¿Y la otra izquierda? ¿Hubiera deslindado de inmediato o se habría quedado, paciente, esperando las migajas que le cayeran por su silencio”.

Dice la teoría de los universos múltiples que existen tantas realidades paralelas en el universo como las que se puedan imaginar. Tal vez en alguna de aquellos millones de posibles realidades, hay una en la que Pedro Castillo se yergue triunfante como el victorioso dictador de esta republiqueta macondiana. Una realidad en la que todos sus enemigos políticos han sido disueltos y Dina Boluarte toca puertas de embajadas a ver si le liga un asilo por el amor de Dios.

¿Se imaginan qué hubiera pasado en esa hoy imposible ucronía? ¿Cómo hubiera tomado la comunidad internacional —fuera de los cuatro gatos que aún apoyan al hoy preso aprendiz de dictador— una medida golpista que parece tomada de los tiempos de la guerra fría? ¿Y las fuerzas armadas? ¿Habrían abrazado sus cadenas con el mismo servilismo de aquellos generalotes que se inclinaron ante Vladimiro Montesinos o hubieran salido a defender la democracia como se debe? ¿Y la otra izquierda? ¿Hubiera deslindado de inmediato o se habría quedado, paciente, esperando las migajas que le cayeran por su silencio?.

Imposible saberlo, porque la historia es una sola. Pero si alguna certeza cupiera, sería que la gente hubiera, igual que hoy, salido a las calles en contra del dictador, porque el hartazgo de aquí, de allá, de Andahuaylas o Arequipa es general. La consigna, desde un primer momento, fue “¡que se vayan todos!” y cuando Boluarte, ansiosa por ganarse el favor de la otorongada, les garantizó que seguirían medrando hasta el 2026, se detonó la chispa de la indignación popular y se extendió como un incendio forestal.

Por eso, no es descabellado pensar que lo mismo hubiera ocurrido si Castillo y su camarilla de burdos golpistas ganaban la partida. La rabia ciudadana se hubiera desatado sin freno y el país hubiera salido, como ahora, a exigir otro borrón y cuenta nueva para refundar —por enésima vez— esta democracia destinada al eterno asesinato y la inacabable resurrección.

Maritza Espinoza

Choque y fuga

Periodista por la UNMSM. Se inició en 1979 como reportera, luego editora de revistas, entrevistadora y columnista. En tv, conductora de reality show y, en radio, un programa de comentarios sobre tv. Ha publicado libro de autoayuda para parejas, y otro, para adolescentes. Videocolumna política y coconduce entrevistas (Entrometidas) en LaMula.pe.