El mayor canje de espías desde la Guerra Fría, El canje de espías culminó con éxito. Un avión de la Vision Airlines, que despegó horas antes del aeropuerto neoyorquino de La Guardia, aterrizó esta mañana en Viena. A bordo viajaban los 10 agentes rusos del SVR (Servicio de Inteligencia Exterior) canjeados después por cuatro condenados en Rusia por haber espiado para Estados Unidos y el Reino Unido. El aparato fue estacionado junto a otro llegado desde Moscú, un Yak-42, y sus respectivas puertas fueron unidas con una pasarela. Ambos aviones despegaban alrededor de una hora después de vuelta a Rusia y EE.UU. Recordaba la escena de la película soviética “Temporada Muerta” (1968) del cineasta ruso ya fallecido Savva Kulish, cuando el piloto estadounidense Francis Gary Powers, derribado en 1960 sobre los montes Urales durante un vuelo de reconocimiento, es canjeado por el espía soviético Rudolf Abel (William Fischer). Ambos son entregados a mitad de un puente en la frontera. El intercambio real que rememora el largometraje tuvo lugar el 10 de febrero de 1962. Los 10 espías rusos volaron después hacia Moscú. La prensa rusa asegura que la periodista peruana Vicky Peláez se trasladará después a su país, Perú, y la célebre Anna Chapman , lo hará al Reino Unido, cuya nacionalidad aún conserva. Los 10 detenidos en EEUU el pasado 27 de junio tuvieron ayer que reconocerse culpables de espiar para Rusia a fin de poder ser deportados. Sobre ellos pesaban acusaciones de “conspiración”, “blanqueo de dinero” y “falsificación de documentos”, pero no de espionaje . Por parte rusa, el presidente Dmitri Medvédev, firmó esta mañana el decreto que indulta a los cuatro “traidores” que espiaron para Occidente. Se trata del científico ruso, Ígor Sutiaguin, que cumplía en Rusia una condena de 15 años de reclusión y llegó ya el jueves a la capital austriaca, del antiguo coronel del GRU (inteligencia militar), Serguéi Skripal, condenado a 13 años de cárcel, el ex informador del SVR ruso (Servicio de Inteligencia Exterior), Alexánder Zaporozhski, y Alexánder Sipachiov, que fue capturado y enjuiciado en Rusia por trabajar para la CIA. Otras fuentes hablan de un tal Guennadi Vasilenko, en lugar de Sipachiov. Las autoridades austriacas se niegan a facilitar ningún tipo de información sobre lo sucedido en el aeropuerto de Viena. El portavoz del Ministerio del Interior austriaco, Rudolf Gollia, señaló: “No es nuestro asunto, de manera que no puedo confirmar ni desmentir nada”. Una fuente diplomática rusa ya advirtió que no habrá detalles sobre la operación ni información oficial. (Con información de ABC.es)