201 años de una histórica amistad entre Perú y Argentina
Embajada argentina en el Perú conmemora el desembarco del prócer José de San Martín en la Bahía de Paracas. Ahora apuesta por reforzar los principios comunes, como la no intervención en los asuntos internos.
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El 8 de septiembre, argentinos y peruanos recordamos el desembarco del libertador José de San Martín en la Bahía de Paracas. En 1820, a pocas cuadras del puerto, en la ciudad de Pisco, el libertador instaló su primer cuartel general y comenzó a pergeñar lo que sería la primera bandera y el primer escudo del Perú. Desde 1959 se reconoce esta fecha como el día de la Amistad Peruano Argentino con la firma de un Convenio de Cultura y de Amistad.
Con el desembarco de la escuadra libertadora, el plan Continental, ideado por el Gral. San Martín, dejaba de ser un sueño para transformarse en una de las epopeyas más grandes de la historia de América Latina. Es en esta fecha, hace más de 200 años, cuando comenzamos a construir lazos de fraternidad entre peruanos y argentinos, es quizás aquí, cuando surge el sentimiento de pertenencia a la gran familia latinoamericana asociada a la construcción de un proyecto compartido de integración regional.
Pero quizás, el mayor gesto de amistad de Perú con la Argentina fue durante el conflicto de Malvinas. Desde el inicio del conflicto el compromiso peruano fue desde una activa y comprometida búsqueda de una solución diplomática propuesta por el presidente, Fernando Belaunde Terry, y apoyada por el entonces secretario general de Naciones Unidas, Javier Pérez de Cuellar, hasta una solidaridad materializada en infinitas muestras de hermandad con la reivindicación de nuestro país. Grandes filas de voluntarios peruanos se presentaban a las puertas de la embajada para enrolarse en defensa del territorio argentino.
Este es el espíritu que portan más de 300.000 peruanos que migraron que hicieron suyo nuestro país. El esfuerzo, el trabajo y espíritu emprendedor de esos peruanos han contribuido a la consolidación de estos lazos de amistad. Al igual que esos 6.000 jóvenes peruanos que anualmente eligen nuestro país para estudiar, formarse y desarrollar sus capacidades. También muchos argentinos decidieron radicarse en Perú al igual que varias empresas líderes de la Argentina como Pluspetrol, Arcor, Grupo Roggio, MercadoLibre, Aerolineas Argentinas, Techint, Comisea, GIE, Laboratorios Roemmers, Transvial Lima, Havanna, Bagó etc. Todas ellas apuestan al crecimiento con inclusión y a la generación de empleo decente en beneficio de las familias peruanas. Ese mismo espíritu quedará reflejado en el Matasello “Día de la Amistad Peruano Argentina 2021” que hoy presentaremos en la sede de nuestra embajada, con la colaboración del SERPOST.
Sin lugar a dudas peruanos y argentinos estamos llamados a trabajar juntos en pos de una mayor integración latinoamericana, espacio donde compartimos principios fundamentales del derecho internacional como son el principio de no intervención en los asuntos internos, la eliminación de sanciones económicas unilaterales contra países hermanos, la libertad de expresión, la defensa plena e integral de los derechos humanos, la solución pacífica a las controversias y el respeto mutuo entre países soberanos. Estos principios son los que defendemos en forma conjunta en los distintos foros internacionales y que seguiremos defendiendo, porque consideramos que son tiempos de solidaridad e inclusión.
La pandemia ha develado la existencia de brechas profundas al interior de cada uno de nuestros países y la existencia de enormes inequidades. La crisis nos convoca a trabajar en la generación de visiones comunes para atender necesidades compartidas. En este sentido el fortalecimiento de nuestras políticas públicas, el intercambio de buenas prácticas, el desarrollo de políticas activas de inversión en materia de ciencia y tecnología son fundamentales para atender las demandas sociales en educación, salud y trabajo.
Hoy enfrentamos un contexto de mucha incertidumbre, nacional e internacional. Al redefinir prioridades comunes, debemos reencontrarnos con el espíritu y los valores que movilizaron a nuestros grandes próceres. Debemos despojarnos de las ambiciones e intereses personales y trabajar en la búsqueda de consensos para atender las necesidades de los más excluidos. Ese será, seguramente, el desafío mayor para nuestros países en tiempos de pospandemia y en el camino al tricentenario.
Embajada argentina en Perú
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