Pentágono evalúa anular contrato millonario con Microsoft por proyecto JEDI
Amazon, la otra multinacional involucrada, considera que el contrato fue planteado con “irregularidades” durante el mandato de Donald Trump.
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Estados Unidos evalúa cancelar el multimillonario y polémico contrato JEDI, adjudicado a Microsoft en 2019 a través del Departamento de Defensa, debido a que lo mantiene enfrentado judicialmente con Amazon, publicó el diario The Wall Street Journal.
Al parecer, los responsables del Pentágono están preocupados ante la posibilidad de que el proceso judicial sea tan largo que termine perjudicando de alguna manera la aplicación del proyecto, que fue otorgado a Microsoft por la Administración de Donald Trump (2017-2021). Por dicho motivo, se está evaluando la posibilidad de cancelarlo y empezar de nuevo.
El 28 de abril, una jueza del Tribunal de Reclamaciones Federales de EE. UU. rechazó dos mociones presentadas por el Gobierno y por Microsoft, que le pedían que desestimara las objeciones presentadas por Amazon, garantizando así la continuidad de la batalla legal.
El contrato, llamado Empresa de Infraestructura Conjunta de Defensa (JEDI, en inglés), tiene como objetivo sustituir los sistemas de almacenamiento propios por los de datos en la nube de gigantes tecnológicos, lo que permitiría acceder a la última tecnología y a servidores masivos.
Además del valor económico del contrato, aproximadamente 10.000 millones de dólares, el mayor de la historia del Pentágono en el ámbito tecnológico, su importancia va más allá, ya que dependiendo del éxito del proyecto podrían seguir otros similares con diversas agencias gubernamentales.
La decisión del Pentágono de adjudicar a Microsoft el contrato para almacenamiento de datos en la nube, en lugar de a Amazon, fue dada a conocer a finales de 2019 y resultó sorpresiva, ya que se tenía como favorita hasta ese entonces a la firma que dirige Jeff Bezos.
Desde el anuncio de la decisión, Amazon acusó al Pentágono de responder a criterios políticos en vez de técnicos, y denunció supuestas presiones de Trump para perjudicar a un posible ”enemigo político”, pues el expresidente mantenía un enfrentamiento personal público, el cual, supuestamente, impidió que la adjudicación recayera en la competencia de Microsoft.
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