¿El 30 de abril es feriado o día no laborable en Perú?
Domingo

¿Debemos usar pruebas de antígenos para abrir los eventos masivos?

En Barcelona se usó el test para controlar el ingreso de 5 mil espectadores a un concierto. Tras el experimento, no hubo un contagio masivo. Tres expertos opinan si es posible aplicarlas en el país con el mismo fin.

Cerca de 5 mil espectadores asistieron al concierto de Love of Lesbias en Barcelona, fue el primer concierto sin distanciamiento de Europa. Crédito: AFP
Cerca de 5 mil espectadores asistieron al concierto de Love of Lesbias en Barcelona, fue el primer concierto sin distanciamiento de Europa. Crédito: AFP

Fue el primer concierto sin distanciamiento social realizado en Europa desde el comienzo de la pandemia. El 27 de marzo último, el grupo de rock Love of Lesbian tocó para 4.592 personas en el Palau Sant Jordi de Barcelona. Fue una prueba piloto realizada por un equipo científico del hospital Germans Trias i Pujol y un grupo de promotores musicales, cuyo fin fue probar si se podían realizar eventos masivos sin contagios. La organización del concierto fue estricta: los asistentes debieron hacerse una prueba de antígenos y dar negativo; además, ya en el recinto, tuvieron que usar mascarillas tipo FFP2 y el ambiente debía estar en permanente ventilación. Se recurrió a esa prueba por ser rápida, más barata y sencilla que la PCR o mole- cular, pues no requiere un análisis de laboratorio y arroja los resultados en 15 minutos. Quince días después, solo se detectaron seis contagios que, aseguraron las autoridades sanitarias,no se dieron en el concierto. La prueba piloto catalana sentó un precedente en el mundo: validaron un protocolo para controlar el riesgo de los contagios en recitales.

Antonio Quispe

Epidemiólogo y docente de UTEC

“Las pruebas de antígenos no son suficientes”

No estoy de acuerdo porque las pruebas de antígenos solas no son garantía de que no se filtre ningún infectado en un evento masivo. Esto se debe a que su límite de detección es menos sensible que el de una prueba molecular o PCR, que es la prueba diagnóstica de elección. Esto significa que, en zonas calientes como Lima y otras regiones del Perú, la probabilidad de que una prueba de antígenos sola dé un falso negativo es mucho más alta que en una zona fría como Barcelona. Además, en el concierto de Love of Lesbian no solo se les hizo el test a todos los asistentes, sino que se aplicaron una serie de medidas de prevención como el uso de respiradores FFP2 y protocolos de bioseguridad. Hay que tomar en cuenta que, por sí solas, las pruebas de antígenos no son suficiente medida de prevención para reunir a multitudes. El concierto aludido fue relativamente seguro porque se realizó en una ciudad donde los contagios están controlados, en un ambiente con ventilación, con aforo reducido, con prueba negativa de por medio y, repito, con respeto a las medidas de bioseguridad. Sería muy irresponsable que, en el Perú, estando en el peor momento de la pandemia, se realicen conciertos masivos. Estos se podrán llevar a cabo cuando superemos la segunda ola, y el día que, como Israel, alcancemos la tan ansiada inmunidad de rebaño.

Camille Webb

Médico infectóloga dela Universidad Cayetano Heredia

“Se nos podrían escapar personas infectadas”

Los eventos masivos siguen siendo los de mayor riesgo y los más peligrosos, y ninguna prueba puede reducir al cien por ciento los contagios. La prueba de antígenos tiene algo de utilidad de forma particular porque es fácil de aplicar y dará resultados rápidos, en tan solo minutos como una prueba de embarazo. Al igual que la prueba molecular, se realiza tomando una muestra con hisopado de la garganta, y reconocerá una proteína del coronavirus, mientras que la de PCR detecta el material genético o ARN del virus. Es más rápida porque no requiere el proceso de amplificar el material genético, que requieren las moleculares. Sin embargo, su sensibilidad es baja, es decir, podríamos tener porcentajes altos de falsos negativos y de esta manera no detectar algunas personas infectadas. Es más, su sensibilidad disminuye notablemente en personas que no tienen síntomas. Recomiendo seguir evitando en lo posible todo evento que congregue a muchas personas, y más aún si se van a reunir en espacios cerrados. Dejo en claro que, al usar pruebas de antígenos en eventos masivos, se podrían evitar algunas infecciones, sin embargo, pueden dar una falsa sensación de seguridad y por su baja sensibilidad se nos podrían escapar varias personas infectadas.

Gabriel Carrasco- Escobar

Investigador de la U. de California

“Incrementarían las dificultades del sistema de salud”

La evidencia actual y las guías de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sugieren el uso de pruebas de antígenos en personas con síntomas compatibles con COVID-19 y advierten que un resultado negativo en personas asintomáticas no descarta por completo la presencia de una infección de SARS- CoV-2. Estos portadores asintomáticos, por lo general, tienen una baja carga viral frente a la cual las pruebas de antígenos no tienen un buen rendimiento diagnóstico. Por esta razón no se recomiendan estas pruebas para el control en aeropuertos, fronteras y, en consecuencia, para eventos masivos. El diagnóstico con las pruebas de antígenos permite identificar y excluir de los asistentes a los portadores del SARS-CoV-2 con cargas virales altas y que, en consecuencia, podrían transmitir el virus con mayor facilidad ayudando, así, a evitar eventos de supertransmisión. Sin embargo, la contribución de los portadores asintomáticos (con baja carga viral) en la transmisión del virus se encuentra aún bajo estudio, y es precisamente esta población sobre la cual las pruebas de antígeno no tienen un buen rendimiento para detectar el virus. Si bien los estudios piloto en Barcelona y Holanda han dado resultados alentadores, el uso de pruebas de antígenos para justificar la apertura de eventos masivos incrementaría las dificultades actuales de nuestro sistema de salud.

Periodista en el suplemento Domingo de La República. Licenciada en comunicación social por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y magíster por la Universidad de Valladolid, España. Ganadora del Premio Periodismo que llega sin violencia 2019 y el Premio Nacional de Periodismo Cardenal Juan Landázuri Ricketts 2017. Escribe crónicas, perfiles y reportajes sobre violencia de género, feminismo, salud mental y tribus urbanas.