Claudio Pizarro: Adiós a las armas

Querido por muchos y resistido por otros, ser Claudio Pizarro no ha sido nada fácil para aquel joven de 20 años que partió de su país para triunfar en Europa. Media vida después, su etapa como futbolista ha llegado a su fin, una que se ha mantenido siempre relevante en el fútbol de más alto nivel y que es suficiente para ser llamada la carrera más exitosa en la historia del balompié nacional.

Las circunstancias nos privaron de verlo pisar el gramado por última vez, pero ahí estuvo, a la expectativa de aportar sus últimas gotas de energía al club que le permitió convertirse en embajador nacional, al equipo que decidió renovarle por 6 días para contar con él para salvar la categoría. Pizarro estuvo con el Werder Bremen, para decir adiós con una alegría en el corazón.

El panorama era incierto. El Werder Bremen no había dejado una buena impresión en el partido de ida por la promoción ante el Heidenheim, pero el hecho de jugar en cancha ajena les daba la chance de aprovechar el gol de visita. Esto, al final fue clave, ya que el resultado final de 2-2 le bastó al Bremen para evitar el descenso.

El drama se instauró en los últimos minutos. Con dos goles en los descuentos, el partido no dio la tranquilidad necesaria para que Pizarro diga adiós como debe ser. Fue una despedida más silenciosa de lo que su carrera merecía, no obstante, sus compañeros se encargaron de reemplazar el calor de una hinchada ausente y lo levantaron en hombros. Con cada impulso hacia el cielo, se dibujaba una sonrisa en su rostro y es esa la imagen con la que se le recordará en tierras teutonas.

Números míticos

El nombre de Claudio Pizarro en Alemania es sinónimo de leyenda y el número 14 de su dorso es sinónimo de gol. En 24 años de carrera, el llamado ‘Bombardero de los Andes’ se convirtió en un ícono no solo en el Werder Bremen, sino también en el Bayern Munich, equipo con el que logró su mayor cantidad de títulos.

En total fueron seis campeonatos de la Bundesliga, cinco Copas de Alemania, una Supercopa de Alemania, una Liga de Campeones, una Supercopa de Europa y un Mundial de Clubes, todos divididos en dos etapas (2001-2007 y 2012-2015) con el equipo ‘bávaro’.

Si de goles hablamos, Pizarro se despide con 320 anotaciones, de los cuales 153 fueron en el Werder Bremen, convirtiéndolo así en el goleador histórico del cuadro verde.

Los récords en la Bundesliga son un tema aparte. Pizarro es el máximo goleador latino en la historia, además de ser el futbolista extranjero con más partidos jugados. Asimismo, al alcanzar las 235 victorias, igualó el récord de Franz Beckenbauer. Ni siquiera en el ocaso de su carrera se cansó de batir récords, ya que el año pasado se convirtió en el jugador de mayor edad en marcar en la Bundesliga.

Los números quedan para la estadística, sin embargo, el cariño de la hinchada y los cánticos que hacían resonar su apellido quedarán por siempre en su memoria. Con el retiro de Pizarro se marca el fin de una era, una que será muy difícil de igualar por otro compatriota, una oportunidad ya sea para llenarnos de orgullo o para reconciliarnos con alguien del que siempre esperamos más, pero que nunca dejó de dar todo.

Las cifras

197 goles anotó en Bundesliga. Es el segundo máximo artillero del siglo 21.

4 clubes europeos lo tuvieron, W. Bremen, B. Munich, Chelsea y Colonia.

20 goles marcó con la camiseta de la selección peruana en 85 partidos.

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