Revelan los nuevos métodos que se usan para ingresar droga, celulares y armas a los penales

Familiares y amigos son quienes introducen la mayoría de los objetos en los días de visita, pero no faltan funcionarios corruptos de la Policía Nacional del Perú y del INPE que se prestan por un puñado de billetes.,Revelan los nuevos métodos que se usan para ingresar droga, celulares y armas a los penales,El ingreso de artículos prohibidos a los penales del país es un tema de ayer y de hoy: Desde inofensivos videos pornográficos hasta celulares, armas de fuego, sofisticados equipos electrónicos y las drogas más cotizadas. Familiares y amigos son quienes introducen la mayoría de los objetos en los días de visita, y no faltan tampoco funcionarios corruptos que se prestan a cambio de un puñado de billetes. PUEDES VER: http://larepublica.pe/impresa/sociedad/801947-visitantes-usan-hasta-biblias-para-ingresar-celulares-los-penales Según el Instituto Nacional Penitenciari existe toda una gama de métodos ingeniosos para burlar la vigilancia y hacer llegar los más diversos artículos a manos de los reclusos. CAMIÓN DE BASURA: El 21 de abril a las 9:45 am ingresó al penal de varones de Trujillo el volquete XI 7984 de la Municipalidad de Huanchaco para recojo de basura. Fueron tres los trabajadores que ingresaron por la puerta principal del recinto carcelario para la revisión personal sin hallarles artículos prohibidos. Sin embargo, en el volquete municipal los agentes descubrieron una mochila que contenía siete celulares con sus respectivos chips y baterías, dos carcasas, 3 cables UBS y 2 decodificadores de señal wifi con sus cables. El paquete fue hallado debajo del asiento del copiloto. El chofer Erick Diego Layza Flores junto con sus compañeros fueron puestos a disposición de la fiscalía de turno y la Policía para las investigaciones. PRESERVATIVOS: Este mes también fueron intervenidas en el penal de Piura dos mujeres que pretendieron ingresar droga escondida en sus partes íntimas. Fue durante la revisión corporal en el cubículo N° 4 que a Claudia Priscila Gómez Zapata (25) se le halló un bulto 'extraño'. Al ser revisado por la agente de seguridad Patricia Silva Medina, se descubrió que era pasta básica de cocaína. Gómez Zapata señaló que pretendía visitar a su esposo Enrique Inoé Ramírez Arriola, pero que el paquete era para el interno Noé Neyra Chamba, sentenciado por tráfico ilícito de drogas. Ambos reclusos son del pabellón B. Asimismo, a Yuli Ermelinda Carreño Farfán (36) se le halló un bulto forrado con un látex. La mujer señaló que pretendía visitar a su esposo, Luis Alberto Chávez Lazo, en el pabellón C y sentenciado por robo agravado, pero que el paquete era para un interno de apellido Culquicondor del pabellón D. SANDALIAS: Otro método para pasar drogas fue descubierto en el penal de varones de Trujillo. Camuflados en suelas para sandalia de mujer, personal del INPE halló cerca de dos kilos de droga en 73 suelas cuando una visita pretendía ingresar al recinto carcelario. La incautación fue hecha a Roxana Meléndez Ubillús (39) quien fue intervenida al momento de la revisión de paquetes en la puerta principal. La máquina de rayos X puso en evidencia que en cada suela había objetos sospechosos. Por ello, los agentes penitenciarios realizaron una revisión manual exhaustiva, encontrando en el interior de 16 unidades para calzado femenino la cantidad de 320 gramos de marihuana, y en otras 57 unidades un total de 1.425 gramos de pasta básica de cocaína. La intervenida manifestó que el cargamento estaba dirigido al interno Elvis Rodríguez Flores, inscrito en el área laboral de zapatería que cumple una sentencia de 13 años por el delito de robo agravado. OTROS MÉTODOS: Cada vez son más las visitas que ocultan el contrabando dentro de sus propios cuerpos. Se ha descubierto a personas con obesidad mórbida que esconden armas, droga o celulares entre los amplios pliegues de su piel. También se ha enciontrado un libro infantil para colorear, en el cual una inocente dedicatoria decía: "A papi". Llegó por correo a nombre de un recluso, y en sus páginas aparecían garabatos de crayón supuestamente hechos por un niño. Resultó que estaban compuestos por una pasta en la que se habían mezclado sustancias psicotrópicas, además de pigmentos. Frijoles, lentejas y pallares artificiales y granos de café pintados a mano han sido utilizados en algunas prisiones para alojar pequeñas cantidades de cocaína. Se trataba de imitaciones muy buenas, que engañaban fácilmente a los funcionarios. Pero, además de las drogas, las armas también son una mercadería cotidiana. Huesos de pollo cepillos de dientes afilados son algunas de las 'materias primas' con que los presos fabrican sus armas.