Se dividieron. Un enfrentamiento se registró en la plaza de Armas de Puno entre dos grupos de manifestantes: los que apoyan el paro indefinido y exigen la renuncia de Dina Boluarte, y los que piden la reactivación económica de la región altiplánica. Con carteles, megáfonos y pifias, empresarios y microempresarios de distintos rubros hicieron oír sus diversas demandas y reclamos.
Los reclamos de los empresarios que piden la reanudación de las actividades económicas en Puno se debe a que, según ellos, las protestas han perjudicado sus negocios, además de que los manifestantes les impiden abrir sus locales. En caso de que alguien decida hacerlo, son atacados con piedras o ladrillos, comenta una de las empresarias afectadas.
“Yo tengo una oficina, una institución educativa, y no puedo abrir porque me han tirado piedras varias veces”, aseveró una de las manifestantes en contra de continuar con las jornadas de protestas en la región altiplánica. Pese a ello, los empresarios afirman estar en contra de Dina Boluarte y el Congreso de la República.
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Joanna Terán, activista por los derechos humanos, hizo hincapié en la suspicacia que genera el hecho de que el grupo de agentes de la Policía Nacional del Perú (PNP) que se encontraban en el lugar hayan resguardado a un grupo de manifestantes (los que piden el cese del paro indefinido).
Este enfrentamiento entre empresarios de los diversos sectores se da en el contexto de las protestas que se suscitaron en la ciudad de Juli, provincia de Chucuito, región de Puno, en la cual se registraron, aproximadamente, ocho civiles heridos. Las protestas en la región del altiplano parecen no cesar hasta que la presidenta de la República renuncie a su cargo.