Una familia vive en las peores condiciones inhumanas, entre la basura, heces y los desperdicios que son dados a unos puercos. Se trata de una familia cuyos miembros padecen de problemas mentales y que viven en la inmundicia en la ciudad de Sullana, de la región Piura.
Roxana es una mujer que padece, al parecer, de esquizofrenia, junto a ella están sus hijos gemelos de 12 años aproximadamente, quienes también presentan problemas mentales, al igual que desnutrición y otras enfermedades. Con ellos, vive la abuela, doña Gregoria, que es una mujer discapacitada.
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El cuadro que vive esta familia es deprimente. Necesita no solo recibir un plato con comida, ir al colegio y vivir dignamente, lo primordial es ser tratados pro profesionales en Salud Mental y recibir la medicación, para evitar los cuadros de violencia con los que actúan contra sus vecinos de la calle Los Arrieros en el asentamiento César Vallejo, quienes indicaron que los menores lanzan piedras, toman cuchillos, entre otros objetos.
La vivienda es una cueva de ratas, gallinas, cerdos que los alimentan con la misma comida que ellos se llevan a la boca. Sus defecaciones las realizan en cualquier lado y duermen en el piso a pesar de las temperaturas que se presentan.
Los moradores pidieron que las autoridades tomen cartas en el asunto, pues señalan que la madre de familia junto a los menores deambulan por las calles hasta altas horas de la madrugada, incluso se les ha encontrado libando chicha de jora a su corta edad.