La decisión de convertirse en madre lleva a muchas mujeres a estar atentas a los cambios en su cuerpo, especialmente a medida que se acerca la fecha de su menstruación. En este periodo, suelen observar con detenimiento cualquier señal que pueda indicar un posible embarazo, incluso antes de que se produzca la falta del ciclo menstrual o de realizarse una prueba específica. Por ello, es fundamental estar informadas sobre los primeros signos de embarazo que pueden manifestarse, ya que estos pueden servir como indicios valiosos en esta etapa de expectativa.
Es importante tener en cuenta que estos síntomas también pueden ser causados por otras condiciones o factores, por lo que no son necesariamente una confirmación definitiva del embarazo. Por eso, es importante consultar a un profesional de la salud para una confirmación adecuada.
Los primeros síntomas que puedes presentar cuando estás embarazada son los siguientes:
Las pruebas de embarazo indirectas detectan la hormona hCG (gonadotropina coriónica humana), que aumenta cuando el embrión se implanta. La fiabilidad del resultado depende del momento en que se realice y la forma en que se lleve a cabo. Por ello, se aconseja esperar tres semanas después de la relación de riesgo (acto sexual) y optar por una prueba de sangre para obtener una certeza más precisa.
En cuanto a la prueba casera, el análisis se hace a través de la orina y arroja un resultado cualitativo sobre la presencia de la hormona del embarazo, es decir, simplemente comprueba si la hormona de embarazo está presente o no. Asimismo, este tipo de prueba necesita una gran cantidad de hormonas para detectar el embarazo; por ende, existe más probabilidad de que, si tú tienes un embarazo muy temprano, salga negativo en este tipo de pruebas, y no significa que no estés gestando.
Estas pruebas detectan la hormona hCG de manera cualitativa, por lo que permite medir la cantidad exacta de hCG en la sangre, incluso en niveles mínimos. Se realizan en consultorios médicos o laboratorios y son más confiables que las pruebas caseras si se efectúan pocos días después de la concepción.
Si se realiza en el periodo de tres semanas recomendado, el resultado, sea positivo o negativo, debería ser claro; sin embargo, un resultado positivo no garantiza que el embarazo sea viable. Por ello, tras confirmar la gestación con esta prueba, el siguiente paso es llevar a cabo una ecografía transvaginal.
La ecografía transvaginal es la única prueba de embarazo directa que asegura al 100% la presencia de un embarazo, ya que permite confirmar su viabilidad mediante la detección de los latidos cardíacos.
Esta prueba debe realizarse entre las ocho y las doce semanas, cuando el bebé se encuentra en la zona intrapélvica. Pasado este periodo, el bebé se desplaza a la región abdominal, momento en el que se recomienda otro tipo de ecografía que también permite evaluar su tamaño y posición.