Que las mujeres no obtengamos un orgasmo tan fácilmente como los hombres durante la penetración es algo común, puesto que, en el caso de las féminas, las forma efectiva de llegar al clímax es mediante la estimulación directa al clítoris; sin embargo, existen maneras para que el coito sea placentero.
Según la terapia sexual 'sexocorporel', que se basa en el entrenamiento de conciencia y modificaciones de la actividad muscular y técnicas de estimulación, el movimiento corporal (en particular, los desplazamientos fluidos de balanceo de la pelvis hacia adelante y atrás) juega un papel crucial en el aumento de la probabilidad de que una mujer experimente un orgasmo durante el coito vaginal.
Por ello, con esta teoría, un estudio elaborado por la Universidad de Zúrich (2018) concluyó que mover el cuerpo durante el coito puede facilitar un orgasmo en las mujeres, indistintamente de su dependencia de la estimulación externa o simultánea del clítoris.
Para obtener ese resultado, los investigadores realizaron una encuesta a 1.237 mujeres de entre 18 y 75 años. La técnica de excitación aplicada con mayor frecuencia por las féminas durante las actividades sexuales con su pareja fue el roce preciso, seguido del movimiento corporal.
Asimismo, la prueba demostró que las mujeres experimentaron significativamente más orgasmos durante el coito vaginal con estimulación simultánea del clítoris en comparación de aquel sin dicho estímulo.
Teniendo en cuenta la descripción del estudio, la pose que proporciona una mayor probabilidad de orgasmo es la vaquerita. Esta posición es famosa por el control que le ofrece a la mujer sobre los movimientos pélvicos.
Estos pueden ser variados, pero considerando la investigación, los movimientos que van de adelante hacia atrás tienen mejor respuesta para el clímax. A continuación, te dejamos algunas imágenes para que puedas llevar a cabo esta posición y sus variantes.
Foto: Bad Girls Bible
Foto: Bad Girls Bible
Foto: Bad Girls Bible
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Los movimientos circulares o en ocho en la cama son para agregarle pasión y jugueteo. Estos permiten que el pene pueda tocar más la parte de la pared vaginal. Además, te dan un encuentro íntimo y de suavidad con tu pareja. Aprovecha que tus brazos pueden estar más libres y ponlos encima de tu cabeza para agregarle sensualidad y hacer que tu figura se luzca.
Para esta posición es muy importante que intentes abrir bien las piernas y posicionar tus rodillas de manera que estas te puedan dar impulsos, ya que para mover tu cadera para delante y atrás necesitarás un buen impulso de tus muslos. Apóyate del pecho de tu pareja para que agarres un mejor ritmo y no te canses tanto. Un plus de esta postura es que es posible estimular tu clítoris con su pecho.
De acuerdo con los estudiosos, esto se da por una combinación de estimulación externa del clítoris e interna de las paredes vaginales, la musculatura pélvica que rodea la vagina y estructuras internas del primer órgano mencionado.
Esto ocurre porque los movimientos oscilantes de la pelvis hacia delante y atrás implican músculos que favorecen el flujo sanguíneo a la región pélvica, a los abdominales inferiores y el suelo pélvico.
"Enseñar a las mujeres a mover la pelvis y el tronco hacia adelante y hacia atrás en movimientos de balanceo tiene más probabilidades de aumentar su excitación durante el coito vaginal, mientras que alentarlas a autoestimular el clítoris durante el coito vaginal no necesariamente conducirá a más orgasmos si se hace con el cuerpo inmovilizado", precisan los especialistas.