Buscar nuevas experiencias, salirnos de nuestra rutina y explorar nuevas técnicas sexuales es muy importante durante nuestra vida en pareja o en nuestras relaciones de tinte sexual. “El sexo es más que solo penetración”, nos recuerda la sexóloga Eirelyn Gómez. Por ello, damos recomendaciones para iniciar el encuentro sexual, así como consejos para poder comunicarnos de mejor manera con nuestro compañero/a y explotar nuestras sensaciones al máximo.
Unos buenos masajes eróticos pueden ser la clave para que nuestra noche sea inolvidable y un paso más para conocer cuáles son nuestras zonas erógenas y mejorar nuestra experiencia durante las relaciones sexuales.
Para mejorar la comunicación sexual, según la especialista y fundadora del portal @sexologaeirelyn, Eirelyn Gómez, es importante que las parejas se den un espacio para dialogar sobre sus deseos sexuales.
“Una de las mejores formas de fortalecer la comunicación sexual de la pareja es hacerlo fuera de la cama, buscar y propiciar espacios para hablar de sexo, por ejemplo, luego de un café, después de una cena romántica o después del sexo, abrazarse, conversar y comunicarnos sobre qué nos gustó y lo que no”, afirma.
Asimismo, recalca que es importante que las parejas tengan la confianza de poder verbalizar sus deseos sexuales y contar su experiencia, aquello que le gustó y lo que no, durante el acto sexual.
Así como poder comunicarnos y hablar de la vida sexual con la pareja, también se debe tomar en cuenta ciertos juegos previos que mejorarán la vivencia, tales como los masajes eróticos. Estos pueden ser una buena forma de satisfacer a nuestra pareja y aumentar el éxtasis. Para ello, es importante seguir los siguientes consejos:
Uno de los aspectos fundamentales durante los masajes y el sexo es conocer los puntos de máximo placer en el cuerpo de nuestra pareja. Para esto, lo principal es atrevernos a tocar a la pareja sexual e ir descubriendo poco a poco cuáles son sus zonas más erógenas. Unos masajes pueden ser una buena oportunidad para descubrir más sobre nuestros organismos.
“El cuerpo de la pareja debe ser un mapa que se debe explorar con los dedos, con la lengua e incluso con cualquier elemento como un juguetito o una tela de seda o una rosa”, comenta la sexóloga Eirelyn Gómez. “No hay que conformarnos con siempre el mismo lugar, toda la piel es erógena de pies a cabeza, entonces podemos comenzar por el cabello, el cuello, las orejas, los pezones, las tetillas(en caso de los hombres), el abdomen, las nalgas, los pies, las piernas. Salir de la zona de confort y comenzar a explorar todo el cuerpo progresivamente”, señala.
Asimismo, durante los masajes eróticos se pueden intentar hacer diferentes y delicados movimientos con las manos. Los movimientos circulares alrededor de los hombros y la espalda pueden ser muy relajantes, asimismo, los amasamientos por la parte de los muslos y unas suaves percusiones pueden mejorar la experiencia. De igual forma, no olvides rozar siempre el cuerpo de tu pareja, es decir, deslizar con suavidad tus manos por todo su cuerpo.