La mayoría de mujeres alguna vez en su vida ha fingido un orgasmo. Según un estudio publicado en la revista Journal of Sexual Medicine, en el que los investigadores de la Universidad Brigham Young, en el estado de Utah (EE UU), analizaron la percepción del orgasmo en 1.683 parejas heterosexuales recién casadas, y solo el 49% de las mujeres puedo alcanzar el orgasmo.
Conoce aquí las razones de por qué las mujeres fingen sus orgasmos y cómo les puede afectar, de la mano de la educadora sexual y escritora del libro “Hoy tengo ganas de mí. 7 historias de masturbación femenina”, Sandra Campó.
Porque le da vergüenza no saber cómo llegar a un orgasmo
La educadora indica que las mujeres, normalmente, tienen la idea de que el objetivo final es llegar al orgasmo, y cuando no sabemos cómo hacerlo nos da vergüenza. “Preferimos fingir porque tenemos esta presión encima que debemos llegar al clímax, ya que sino hay algo malo en nosotras mismas”
Para que su pareja no se sienta mal
Esto se da porque la persona piensa que su pareja es la responsable de su placer. “Eso es un grave error. El orgasmo es una experiencia personal que ocurre en nuestro cuerpo, por lo tanto somos nosotras las dueñas de cada uno de nuestros orgasmos. Lo único que hace la otra persona que nos acompaña en un encuentro sexual es colaborar, contribuir y promover nuestro orgasmo”, señala Campó
No está disfrutando y quiere que termine la relación sexual
La especialista comento que con a lo largo de su experiencia ha encontrado que esta práctica es muy común. “Esto esta mal porque deberíamos ser capaces de terminar una relación sexual en el momento que ya no nos gusta o porque queremos acabar o cambiamos de opinión”
Porque afecta la vida sexual de la mujer, ya que no nos permite comunicar o descubrir qué es lo que realmente nos gusta y nos mantiene en el rol de complacer. “Yo antes lo veía como un super poder, pero luego me di cuenta que las que nos perjudicamos somos nosotras mismas al decirles que nos está gustando tal o tal práctica, que en realidad no nos esta dando placer”, recalca Sandra Campó.
Ante este problema, la educadora sexual dio algunas recomendaciones para evitar esta práctica y empezar a tener orgasmos verdaderos.