Desde el año 2000, la actividad sexual de los jóvenes en Estados Unidos ha caído estrepitosamente, según investigadores de la Universidad Estatal de San Diego. Tras realizar una encuesta a personas de 18 a 24 años, el sondeo evidenció que las redes sociales y los videojuegos podrían estar llenando ese vacío.
El sondeo mostró que, desde el 2000 hasta el 2018, casi uno de cada tres hombres indicó no haber tenido sexo en el último año. Asimismo, los hombres que se encontraban desempleados tenían un trabajo de tiempo parcial o contaban con ingresos menores fueron más propensos a ser sexualmente inactivos, al igual que los varones y mujeres que eran estudiantes.
El porcentaje de varones de 18 a 24 años que no tuvieron sexo aumentó del 18,9 %, entre 2000 y 2002, al 30,9 %, entre 2016 y 2018. Los investigadores concluyeron que las posibles razones para la caída de la actividad sexual han sido el estrés de tener que equilibrar el trabajo y las relaciones íntimas, así como el encuentro de otras formas de entretenimiento.
“Ahora hay muchas más opciones de cosas que hacer en la tarde que las que antes había y menos oportunidades de iniciar la actividad sexual si ambas partes están absortas en las redes sociales, juegos electrónicos o maratones audiovisuales”, explicó a Reuters Jean Twenge, del departamento de psicología de la Universidad Estatal de San Diego, en un editorial que acompañó al estudio.
Por otro lado, la frecuencia de relaciones sexuales permanecieron entre las mujeres solteras y no hubo un descenso notable entre los hombres heterosexuales, aseguraron los psicólogos.
Ahora bien, los investigadores también señalaron que la tendencia de “crecer lentamente” no explica por qué el sexo también disminuyó entre los adultos mayores y casados, por lo que advirtieron que “el crecimiento de internet y los medios digitales” podrían estar afectando la vida sexual.
“De manera simple, ahora hay muchas más opciones de cosas para hacer al final de la tarde que antes y menos oportunidades para dar inicio a la actividad sexual si ambas partes están absortas en las redes sociales, los juegos electrónicos o las maratones de series”, añadió Twenge.