El Poder Judicial condenó al exfiscal superior Abel Concha Calla por los delitos de tráfico de influencias real y simulada. Este proceso penal es parte del caso conocido como Los Temerarios del Crimen. Esta banda habría operado en torno a la Municipalidad Provincial de Chiclayo. La pena que recibirá el exfiscal de la Décima Fiscalía Superior Penal de Lima es de nueve años y cuatro meses de prisión.
Asimismo, Concha Calla deberá pagar una reparación civil de S/220.000, y será inhabilitado de sus funciones por 15 años.
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Según acusación fiscal en su contra, el exfuncionario había brindado información reservada al exalcalde de Chiclayo David Cornejo Chinguel.
El tribunal conformado por Víctor Roberto Prado Saldarriaga, Inés Villa Bonilla y José Antonio Neyra mencionó que Concha actuó “con previo conocimiento de los delitos de tráfico de influencias”.
Por otro lado, los jueces refirieron que, ante el delito de revelación indebida de un colaborador eficaz, que causó perjuicio de la función pública, los organismos competentes podrían abrir una investigación en su contra.
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En 2022, la Junta Nacional de Justicia (JNJ) había destituido a Abel Concha Calla al determinar que incurrió en una falta muy grave al tener una reunión con el entonces alcalde de Chiclayo, David Cornejo Chinguel, conociendo que era investigado por liderar una organización criminal.
Según Perú Legal, en la ponencia del procedimiento disciplinario Nº 161-2020-JNJ, a cargo de la consejera Imelda Tumialán, quedó acreditado su alto grado de participación en la falta, dado que en su condición de fiscal superior logró obtener información “sobre una investigación por corrupción que no se encontraba bajo su responsabilidad”.
La pena de prisión esperará que se ratifique en una instancia superior para hacerse efectiva.