Granadas RPG y MGL robadas al Ejército son vendidas a terroristas

Abastecedores de la muerte. El Fuero Militar ha procesado y condenado a tres militares del Ejército por hurtar decenas de explosivos de alta potencia, con penas que van de 4 a 8 años de prisión; a pesar de haberse comprobado que el destino final del material de guerra era las huestes senderistas del Vraem ya que las granadas tienen sus respectivos lanzadores., / UI Los efectivos del Ejército que robaron granadas tipo MGL y RPG de los almacenes de los cuarteles donde estaban asignados, tenían planeado venderlas a la organización terrorista Sendero Luminoso, que opera en el valle de los ríos Apurimac, Ene y Mantaro (Vraem). Fuentes del Fuero Militar Policial que procesaron a los militares acusados señalaron que estos estaban relacionadas con mafias que se dedican a abastecer de armamento a los senderistas. Descartaron que las granadas MGL y RPG son destinadas a las bandas de delincuentes comunes, porque estas no cuentan con los lanzadores respectivos. Fotografías y videos incautados por agentes de la Dirección contra el Terrorismo (Dircote) a miembros de Sendero Luminoso en el Vraem, confirman que disponen de los lanzadores M-203 y MGL-6, que disparan las granadas de 40 milímetros de alto poder explosivo. También manipulan los lanzagranadas RPG 7B para explosivos tipo P-G7. Es más, fuentes de la policía antiterrorista mencionaron tres casos en los que los subversivos utilizaron las granadas en acciones contras las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional. El dos de noviembre de 2007, los terroristas lanzaron granadas MGL a la comisaría de Ocobamba (Chincheros, Apurímac), donde mataron a un efectivo e hirieron gravemente a dos. El dos de agosto de 2009, los senderistas asaltaron la comisaría de San José de Secce (Santillana, Huanta, Ayacucho), que dejó un saldo de tres policías y dos civiles fallecidos. En la acción los senderistas dispararon granadas MGL. Diario La República Uso extensivo Poco después, el dos de septiembre del mismo año, los senderistas derribaron un helicóptero Mi-17 de la Fuerza Aérea e hicieron estallar la máquina con una granada de RPG. Fallecieron tres efectivos militares. "En recientes incautaciones de armamento y municiones hemos encontrado las granadas MGL y RPG, lo que demuestra que los principales clientes del robo de este tipo de explosivos de alto poder destructivo son los terroristas, que pagan grandes sumas con el dinero del narcotráfico", indicaron las fuentes. El Fuero Militar Policial ha enjuiciado a tres efectivos del Ejército por dos casos de huerto de granadas MGL y RPG de arsenales de la institución. Lo que llama la atención es que los responsables recibieron penas no por la gravedad de los delitos sino por el valor de lo que birlaron. El técnico EP Juan Piscoya Cabañas y el suboficial EP Jorge Mayhua Quispe fueron sentenciados a 7 y 4 años de cárcel, respectivamente, por haberse apropiado de 15 granadas MGL y 8 granadas para RPG, además de 10 mil 890 municiones calibre 5.56 y 2 dos mil municiones calibre 7.62, aparte de decenas de uniformes militares. El técnico Juan Piscoya y el suboficial Jorge Mayhua, que laboraban en el Fuerte Cáceres de la ciudad de Huancayo, fueron detenidos a balazos cuando se desplazaban en una camioneta para entregar el material de guerra a un contacto que lo llevaría al límite entre Pangoa (Satipo) y Ayahuanco (Huanta), el ámbito de acción de los terroristas que encabezan los hermanos Víctor y Jorge Quispe Palomino. Estos hechos ocurrieron el 15 de abril de 2013. Más recientemente, el 12 de junio de 2014, el suboficial EP Faustino Preciado Rodríguez, fue arrestado al comprobarse que había hurtado 267 granadas MGL, que era toda la existencia del Batallón de Infantería Arequipa N° 14, en Pimentel, Chiclayo. Preciado negó siempre haber sido autor del robo, pero todas las evidencias lo sindicaban. Según las autoridades que investigaron el caso, las cajas contenedoras, en donde se encontraban las granadas, fueron violentadas. Esta verificación permitió establecer indicios razonables de que Preciado Rodríguez tuvo participación directa en los hechos denunciados en calidad de autor. Castigo leve La Fiscalía Militar Policial N° 4 de Chiclayo, a cargo del capitán PNP Rony Laboriano López, inició con toda celeridad una investigación preliminar que trajo como resultado la detención y encarcelamiento del acusado. Pero hasta el momento no se ha identificado a sus cómplices que se apropiaron de las granadas y todo indica que las vendieron a los terroristas. El suboficial Faustino Preciado recibió una pena de solo 4 años y 3 meses de prisión, en función al valor de las granadas. El artículo 134° del Código Penal Militar Policial, sobre la apropiación ilegítima de material destinado al servicio, señala lo siguiente en el caso el producto del robo se dirige a organizaciones criminales: "La pena será privativa de libertad no menor de veinte ni mayor de treinta años (...) Si los bienes robados son destinados a una organización terrorista o delictiva". ¿Por qué no se aplicó este criterio en los casos mencionados? Porque durante las investigaciones y el proceso, según las fuentes del Fuero Militar Policial, no se pudo establecer fechacientemente que el material de guerra terminó en manos de los senderistas. El ingeniero Sergio Casanave Quelopana, experto en material bélico, confirmó que el destino de las granadas tipo MGL y RPG son los terroristas de Sendero Luminoso del Vraem y no las bandas delictivas comunes, porque no cuentan con los equipos para disparar dichos explosivos. "Las granadas MGL son unas municiones con unos casquillos de 40 milímetros y acá se usan en dos tipos de armas: en una lanzagranada múltiple MGL y una lanzagranada M-203, que se acopla al fusil M16. Son municiones netamente para uso de guerra", explicó Casanave. "Los cohetes para RPG 7 son calibre 40 mm, pero son antitanque. Entonces estamos hablando de dos armamentos para usos mayores, no es para asaltar un banco o para secuestrar. La delincuencia común no las tiene. En el Perú, el único grupo que las utiliza son los de Sendero Luminoso", precisó el experto. En la reciente acción antiterrorista en la que fue herido el camarada "Antonio", uno de los jefes militares senderistas, se le encontró una libreta con la descripción del tipo de armamento con la que cuentan los terroristas. Están perfectamentes descritas los lanzagranadas para MGL y RPG. "Las granadas tipo MGL de 40 mm. tienen un alcance de 400 metros, con un radio letal de destrucción de aproximadamente 5 a 7 metros. Estamos hablando de que efectivamente mata a todo que es alcanzado en su onda expansiva. Y el RPG es un cohete netamente antitanque que perfora 400 mm, de acero y en la selva tiene un alcance de 400 metros y tiene un radio letal de 8 metros. Pero lo más peligroso es que penetra un vehículo, eso quiere decir que con el impacto va a matar todo lo que hay adentro. En el ataque a un helicóptero de la FAP en Sinaycocha, los terroristas lanzaron una RPG para asegurar la destrucción de la aeronave", indicó Casanave. Por su parte, el ex ministro del Interior, Walter Albán Peralta, consideró que los graves delitos de robo de armamento no deberían ser procesados en el Fuero Militar Policial. "Estamos ante un tema que debe ser examinado por el fuero común y donde las penas deben ser proporcionales a la responsabilidad de quienes han actuado de esa forma. Este tipo de graves delitos no los puede ver el fuero privativo castrense. El fuero común debe ver todo aquello que corresponde a delitos que ofenden a la generalidad de la gente, y el fuero militar debe limitarse a todo lo que tiene que ver con conductas que al interior de la institución militar o policial significa un delito lo que para un ciudadano no es igual", arguyó. "El fuero militar no debería ver delitos comunes y estos son delitos comunes graves. El fuero militar puede sancionar hasta un poco de cuclillas, pero cuando se trata de temas más graves que afectan a la sociedad el fuero común es el que debe actuar y las penas deben ser más drásticas", expresó. Sendero reconoce que cabecilla camarada ‘Antonio’ está herido El pasado dos de septiembre se registró en Llochegua (Huanta, Ayacucho), un choque armado entre una columna senderista dirigida por el camarada "Antonio" y efectivos de la Brigada Especial de Inteligencia. "Antonio" quedó mu mal herido. Abandonó su armamento, sus implementos personales, una radio y dos cuadernos con importantes anotaciones. Sin embargo, no se pudo establecer su fallecimiento. Sin embargo, el último fin de semana los terroristas circularon volantes en los que hacen un recuento de supuestas acciones contra las fuerzas del orden entre julio y septiembre, y afirman que "Antonio" solo recibió heridas leves y que supuestamente logró matar a ocho efectivos de las fuerzas de seguridad y a supuestos colaboradores eficaces. Información completamente falsa. Empero, los terroristas también admiten que "Antonio" perdió su fusil, pero no dicen nada de las libretas que contienen información clave de la organización senderista en el Vraem.