La Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) realiza una cumbre desde el martes 11 de julio hasta el miércoles 12 de julio en Vilna, Lituania. El objetivo del encuentro de jefes de Estado y de Gobierno es discutir varios temas importantes y urgentes para el futuro de la alianza, entre ellos, la guerra de Ucrania y Rusia.
Inició la cumbre de la OTAN 2023. Foto: AFP
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, fue uno de los primeros en llegar a la capital lituana, donde se encontró con el presidente Gitanas Nauseda, para preparar la cumbre. "Estamos unidos y defenderemos hasta el último centímetro de la Alianza", afirmó Nauseda, en una rueda de prensa junto a Stoltenberg.
El mandatario de EE. UU., Joe Biden, su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, y el primer ministro de Suecia, Ulf Kristersson, también se sumaron y se espera la llegada del resto de los miembros.
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Es probablemente la discusión política más determinante. Turquía es clave en la incorporación de Suecia.
El presidente turco, Recep Tayip Erdogan, llega a la cumbre en una posición parecida a la que tenía en el primer momento de su bloqueo, antes de la cumbre de Madrid, en 2022.
Cabe resaltar que la situación de Suecia es compleja, pues no solo la acusa de asilar a miembros del PKK, también de las milicias YPG (Unidades de Protección Popular kurdas), curtidas en la guerra contra el ISIS en el norte de Siria.
Pese a ello, según fuentes españolas, Erdogan podría aprovechar el encuentro para dar un visto bueno, dado que ya no está sometido a la tensión y provisionalidad de unas elecciones.
Este tema es totalmente debatible, pero hasta el momento consideran que no es concebible incorporar a Ucrania en la OTAN. Como dice Joe Biden, hacerlo implicaría que los otros miembros se involucren en la guerra contra Rusia.
Por su parte, el presidente ucraniano sí espera que los reconozcan y Rusia nuevamente amenazó a los miembros de aceptarlo.
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Los aliados del este, principalmente Polonia y los bálticos, piden el refuerzo de la DDA (Deterrence and Defence of Euro Atlanic Area). "Reclaman que los planes regionales de Disuasión y Defensa señalen qué unidades están asignadas y su estado de alistamiento", según altos oficiales consultados por el medio El Periódico.
El objetivo es aumentar capacidad y tamaño. Capacidad: que la Fuerza de Respuesta pueda reaccionar en un máximo de cinco días. Tamaño: de batallón a brigada.
Es necesario destacar que hay un trabajo de logística en la negociación entre los aliados. "Es trabajosa, es compleja, es cara… Y, si por lo menos es para los tuyos… pero si lo haces para otro, tampoco controlas del todo el empleo de los recursos", concluyeron los oficiales.
Con el fin de tener una nueva estructura de mando lista en julio de 2024, se presenta en Lituania lo siguiente: Ankara no aceptará una región militar OTAN en su zona sin que el Cuartel General esté en su territorio.
Finalmente, tras el crecimiento de la OTAN, se propone avanzar en caso de un despliegue masivo en el este, pues se necesita “grandes vías de comunicación, aeropuertos ampliados, puertos más hondos y larguísimos oleoductos”, detalló El Periódico.
El modelo es el Rotozar, la tubería de combustible Rota-Torrejón-Zaragoza, principal arteria militar de España. Sin ese oleoducto, dar de beber a un gran despliegue bélico en el este implicaría un interminable flujo de camiones cisterna por Europa.