Para los católicos, la Pascua o Semana Santa es la conmemoración anual de la pasión de Cristo, es decir, de la entrada a Jerusalén, la última cena, el vía crucis, la muerte y resurrección de Jesús.
Si bien los creyentes judíos también conmemoran esta celebración de carácter religioso, la suya consiste en tradiciones diferentes a la fe cristiana.
PUEDES VER: Crucifixiones reales, azotes y flagelos: la violenta escenificación de la pasión de Cristo en Filipinas
El cristianismo comienza este tiempo litúrgico con el Domingo de Ramos y termina con el Domingo de Pascua, periodo en el que los cristianos recuerdan la pasión y muerte de Jesús.
Las costumbres globales del cristianismo —como la prohibición de comer carnes rojas o la asistencia al viacrucis— se mezclan con usos propiamente nacionales o latinoamericanos.
Por ejemplo, en los países de América Latina se ha producido un giro muy particular. La prohibición de ingesta de carne roja se ha sustituido popularmente por el consumo de productos del mar, que aumentan su consumo en estas fechas.
PUEDES VER: “El sexo es una de las cosas hermosas que Dios ha dado”, dice el papa Francisco en documental
En el caso peruano, es muy típico entre los limeños visitar las siete iglesias entre el Jueves y el Viernes Santo. Los fieles recorren estos lugares a modo de vía crucis, las procesiones además llenan las calles de diferentes localidades, como Ayacucho, considerada una de las zonas más religiosas de Perú.
Sin embargo, en el caso de la Pascua judía, se celebra la liberación del pueblo judío de la esclavitud de Egipto, aunque en la antigüedad era una fiesta de pastores en la que se sacrificaba un cordero como ofrenda para pedir fecundidad.
Esta Pascua judía, conocida como Pésaj, recuerda además cómo Moisés dividió las aguas del mar Rojo para llevar a su gente a la Tierra prometida.
Este año, se lleva a cabo entre el miércoles 5 y el jueves 13 de abril, compartiendo fechas con la celebración cristiana; y de esos ocho días, los dos primeros y los dos últimos son considerados sagrados y no laborables (5 y 6 de abril; y 12 y 13 del mismo mes).
'Cristo Cholo' se prepara para recibir el bautismo por Semana Santa en Lima. Foto: Omar Coca/La República
En la actualidad, los judíos conmemoran el Pésaj con una cena familiar llamada Séder (orden en español), la cual está repleta de simbolismos, además de rezos.
El plato de Séder contiene seis elementos con significado propio: maror, que representan la amargura de la esclavitud; jaroset, que simboliza el mortero utilizado por los esclavos hebreos; karpás, que representa la primavera y la renovación; jazeret, como rábano picante; z'roa, un hueso asado que simboliza el cordero sacrificado en la antigua Pascua de los pastores; y beitzá, un huevo cocido que simboliza el sacrificio festivo y el ciclo de la vida.
Cena familiar judía llamada Séder. Foto: Cedoc
Asimismo, como tradición, se realiza una limpieza integral de todos y cada uno de los rincones de la casa para eliminar los restos de jametz; es decir, alimentos leudados —como migas, galletitas, alfajores.
Además, todo lo que contenga levadura o potencial de fermentar como panes, harina de trigo y fideos debe separarse de la heladera y de las alacenas, y estos alimentos quedan guardados en una caja cerrada hasta el fin del Pésaj.
Hasta entonces, se reemplazan por matzá o pan ácimo, el cual se debe comprar antes de las festividades y debe alcanzar para los ocho días.