Este domingo, al menos seis personas murieron —una de ellas menor de edad— en un ataque de hombres armados a una gallera ocurrido en el suroeste de Colombia, una de las zonas más afectadas por el repunte de masacres que conoce el país en los últimos meses, informaron autoridades.
En el municipio de Buenos Aires, Cauca, se dio “la masacre de por lo menos seis personas” cuando un grupo armado “lanzó una granada y disparó con armas largas” contra los asistentes del recinto de peleas de gallos, al dejar, además, un número desconocido de heridos, indicó la Defensoría del Pueblo (Ombudsman) en un comunicado.
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Carlos Camargo, director del organismo, dijo que la institución “alertó” de la creciente violencia en la zona “desde hace cinco meses”. Asimismo, la policía local manifestó a AFP que un menor de edad perdió la vida en el ataque.
El alcalde de Buenos Aires, Óscar López, rechazó “de manera rotunda” los hechos de barbarie en un comunicado y pidió ayuda del gobierno para construir escenarios de paz en este municipio donde ya se había registrado la matanza de tres personas el 30 de abril.
Por su parte, el general Marco Mayorga, comandante de la tercera división del ejército, señaló en un video como presunto autor de la agresión a la disidencia de las FARC conocida como “Jaime Martínez”.
Además de los rebeldes que rechazaron el pacto de paz de 2016, guerrilleros del ELN, grupos armados origen paramilitar y bandas narcotraficantes se disputan las más de 17.000 hectáreas de hoja de coca sembradas en el departamento con salida al Pacífico, así como las rentas de la minería ilegal y la extorsión.
Según el observatorio independiente Indepaz, se trata de la novena masacre —o asesinato de al menos tres personas en un mismo evento— registrada este año en el Cauca, y la sexagésima ocurrida en el país en el mismo lapso.
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El gobierno culpa de estas matanzas a los grupos armados que se financian del narcotráfico.
Aunque el histórico pacto de paz con las FARC menguó la violencia política, Colombia vive un conflicto que en casi seis décadas que ha dejado más de nueve millones de víctimas, en su mayoría desplazados.