Colocan Cristo gigante para "ahuyentar” al coronavirus en localidad mexicana
Las autoridades municipales de la localidad de Soconusco, en Veracruz, instalaron un Cristo Redentor de 9 toneladas en la glorieta del bulevar Miguel Hidalgo.
El hecho sucedió en México. Una réplica del Cristo del Corcovado de Río de Janeiro fue colocada en la localidad de Soconusco, un pueblo que, según su alcalde Rolando Sinforoso Rosas, no tiene fallecidos por coronavirus y cuyos ciudadanos continúan libres de la COVID-19, después de tres meses de haberse decretado la pandemia en Veracruz.
La estatua religiosa, que pesa alrededor de nueve toneladas y mide aproximadamente siete metros de alto, será inaugurada el próximo sábado 30 de mayo. De acuerdo con las autoridades de la comuna, el principal objetivo del Cristo Redentor es “ahuyentar” a la nueva enfermedad y representar la fe de sus 17.000 habitantes.
“Nosotros somos simplemente administradores del municipio; pero hoy, con todo lo que está pasando, vemos cómo la vida te utiliza para hacer ciertas cosas. No estaba en nuestro proyecto municipal (instalar la estatua), pero no nada más del pan vive del hombre, este Cristo es para los habitantes y es un acto de fe y que nos ayude a salir de la pandemia, a ahuyentarla”, señaló la autoridad edil.
El alcalde de la comunidad aseguró que el Cristo Redentor se financió con los fondos dedicados al crecimiento urbano. (Foto: Crónica)
Sobre los costos de la obra, Sinforoso explicó que pagó con el presupuesto destinado al crecimiento urbano y el 30 % se cubrió con los sueldos. “Hoy, la sociedad está preocupada en lo mundano, nos ocupamos de los celulares, de la tableta, de estar pegados en la televisión, pero nos olvidamos de lo espiritual”, agregó.
A inicios del mes de mayo, el pueblo de Soconusco se hizo conocido en las redes sociales debido a que su alcalde emitió un decreto municipal que “prohibía estrictamente” morir por coronavirus. “Yo ya les dije a mis habitantes: No tienes derecho a morirte, de lo contrario voy a multar a tu familia. Parece juego, pero juego con la mente de los habitantes. Y sí, funciona”, puntualizó Sinforoso al ser cuestionado por la inusual medida.
