Se sentó por diez años junto a una ventana y su rostro pagó las consecuencias

Vía Facebook. La inglesa quedó espantada tras ver cómo terminó el lado izquierdo de su rosto, el cual expuso al sol durante 10 años.,Una mujer en Inglaterra se ha propuesto crear conciencia entre los usuarios de Facebook, tras comentar lo que le sucedió por sentarse durante diez años junto a una ventana. Dawn Jafkins, de 49 años y oriunda de Inglaterra, contó a The Mirror el terror que vivió tras visitar al dermatólogo hace unos meses atrás. El médico no solo se sorprendió, sino la hizo ver que sucedió con la parte izquierda de su rostro. PUEDES VER Facebook: El último adiós de una pareja antes que él sea desconectado La gerente de un centro médico contó al medio ingles que trabajó en el rubro por más de veinte años, de los cuales, diez pasó sentada en un escritorio que estaba posicionado cerca de una ventana. A medida que pasaron los años, Dawn, comenzó a ser más consciente de las arrugas que rodean sus mejillas, especialmente en el lado izquierdo de la cara. “Comencé a notar que cerca a mis mejillas habían comenzado a salir arrugas y manchas”, indicó la británica. Es aquí cuando acude a un especialista; él no le tendía buenas noticias. El Dr. Aarti Narayan-Denning se percató que las arrugas eran el resultado del daño solar, provocado por sentarse tantos años cerca de una ventana. El médico le recomendó a la británica un peeling con SPF50 durante dos semanas para que mejore la condición de su piel. El producto no solo aporta eficacia en el tratamiento de las manchas, sino que también protege las pieles de los rayos UVA y UVB. Tras el tratamiento, la mujer quedó horrorizada tras ver cómo, tras aplicarse los productos, el lado izquierdo de su cara quedaba más oscura que la otra. El doctor le explico que era normal y que su teoría era cierta, el lugar donde había trabajado por tantos años la afectó. "He visto antes ese tipo de daño solar asimétrico y semi-facial en los taxistas, pero ella no lo es. El problema es que siempre ha estado sensata cerca de un lugar donde tenía acceso al sol. Además, en verano no se protegía la piel y estuvo viviendo en el interior del Reino Unido por mucho tiempo” señaló el médico. Tras los meses de tratamiento, Dawn Jafkins terminó con el rostro recuperado y sin mayores problemas.