Táctica. Con el objetivo de ganar las elecciones, Fujimori realiza cambios que saltan a la vista. El no permitir la reelección de antiguos fujimoristas como Chávez, Cuculiza y Aguinaga no es lo único. También abandonó el tradicional anaranjado., Es claro que el fujimorismo ya piensa en la segunda vuelta electoral y por ello cree que el colchón de votos que posee le da ventaja para arriesgarse con algunos cambios significativos. En esa línea, que se prescinda de la vieja guardia fujimorista –Martha Chávez, Luisa María Cuculiza y Alejandro Aguinaga– para la próxima lista de candidatos al Congreso de Fuerza Popular (FP) no es solo una simple forma de separarse de Alberto Fujimori. PUEDES VER: Fiscalía de Lavado de Activos investiga S/. 10 millones de aportes a Fuerza Popular En palabras de la propia Chávez, esto se debe a una estrategia electoral para que Keiko Fujimori se coloque la banda presidencial en julio. "Esto es como en el ajedrez, a veces en las partidas se sacrifica a las piezas importantes para ganar. Y yo creo que no hay nada más sabio que eso", ha explicado. Además, Chávez reveló que ya sabía que quedaría fuera de la lista, pero que le sorprendió que Keiko haya hecho el anuncio el pasado martes. Pese a ello, al igual que Cuculiza, manifestó que apoyará la actual campaña fujimorista. Por la Segunda vuelta Otro que no será tomado en cuenta para la reelección es el congresista Juan Díaz Dios. Como se recuerda, él se separó de la bancada fujimorista tras haber sido acusado de golpear a su mujer. Díaz Dios –vía Twitter– expresó que se enteró de su no reelección a través de una llamada telefónica de la lideresa de FP y dijo estar dolido por esa decisión pero que espera que Keiko gane los comicios de este año. En ese sentido, la analista política Giovanna Peñaflor explica que la ex primera dama "piensa más en cómo estar preparada en la segunda vuelta, pues hacer esos cambios en medio de una contienda electoral es un riesgo". Agrega que el fujimorismo analizó "que es indispensable efectuar esos cambios", cuyos resultados dependerán de que los 'no simpatizantes' de esta agrupación realmente crean que ella se ha desvinculado de su padre y de que sus seguidores sientan que no hay otra opción con la cual encontrarse. El psicoanalista Jorge Bruce, en tanto, expone que estas movidas tienen como finalidad conseguir el voto de los no seguidores del fujimorismo, pero agrega que con Keiko ocurre algo poco visto en política, pues tiene un fuerte colchón de votos pero también un fuerte antivoto debido a que su entorno es el mismo de su padre. "Lo que vemos es más que nada una operación de marketing, más adelante veremos si esto viene con una propuesta de gobierno", insistió. En esa línea, según el análisis de Bruce, Keiko trata de minimizar ese antivoto; sin embargo, deja de lado lo que es sustantivo para el ciudadano, como el plan de gobierno. Agregó que ella se cuidará mucho para no dar a conocer su "débil plan", pues por ahora solo se concentra en ganar la segunda vuelta. En respuesta a ello, Peñaflor asegura que Keiko tiene que lograr que la gente perciba esta decisión como un verdadero cambio en sus ideas. "Si la gente lo percibe de otra manera, no va a tener éxito", expuso. Cambio de camiseta Pero esta 'mutación' del viejo fujimorismo al de ahora no solo trajo una renovación en la lista al Congreso que se presentará en esta campaña, sino también una muda de piel, o mejor dicho un cambio de camiseta. Al mismo estilo de Ollanta Humala en el 2011, Keiko Fujimori optó por cambiar el tradicional color anaranjado del fujimorismo por el blanco. Bruce explica que "el polo blanco es una forma de convertir al fujimorismo clásico en algo angelical", lo cual vendría a ser parte de una estrategia de maquillaje para esta campaña. En tanto, Peñaflor asegura que Keiko Fujimori entiende que si quiere ganar las elecciones no le basta con tener el 30% de la preferencia del elector, ya que puede repetirse el mismo escenario del 2011, en el que llegó a la segunda vuelta pero el pasado le jugó en contra. "Muchos cuestionaron el cambio del polo rojo al polo blanco de Ollanta Humala (en el 2011), pues decían que era negativo hacerlo durante la campaña, pero más negativo era permanecer en lo mismo", explicó. Sin embargo, añade Peñaflor, la ex congresista estaría trabajando más en el espacio que ocupa que en un cambio de entorno o imagen. En ese sentido, explica que cuando se habla de 'espacio' este tiene que ver con que Keiko salga del "encasillamiento" que le ha dado la percepción del gobierno de su padre. "Así ella hable de unión para el país, si es vista como representante de un movimiento que más bien divide al Perú, nadie va a tomar en serio su mensaje", detalló. Al mismo tiempo, el psicoanalista Alberto Péndola afirmó que "este es solo un inicio", ya que –ejemplificó– podrá estar bien vestida pero "de repente no sabe bailar bien en la campaña". Finalmente, todos coinciden en que será el elector quien decida si cree en la Keiko de polo blanco que separa a Chávez, Cuculiza y Aguinaga de la reelección o en la Keiko naranja que no puede dejar de ser 'Fujimori'. Spot de ‘Nano’ de anaranjado El creativo detrás del spot publicitario de Hernando 'Nano' Guerra es el ex fujimorista Carlos Raffo. Lo curioso del anuncio, además de las frases y los bailes, son los bailarines vestidos de anaranjado (color típico del fujimorismo). En ese sentido, el psicoanalista Jorge Bruce explica que es poco probable que Guerra llame la atención de ex fujimoristas usando esos colores. "Imagino que eso es lo que quieren (atraer el voto fujimorista), pero no creo que eso suceda. El viejo electorado fujimorista son gente que se siente abandonada y que tiene la esperanza de recuperar el apogeo. Pensar que 'Nano' va a encarnar esa esperanza es iluso", expresó. Cuando se le consultó a Raffo sobre este punto de vista, el publicista contestó que no declararía nada sobre la campaña de Nano, pero igual "habría más novedades".