‘Gracias Totales’, una oda a la nostalgia [FOTOS Y VIDEO]

Para aquellos que transcurrimos la adolescencia escuchando a Soda Stereo, viendo sus videos por la televisión local y bailando sus canciones durante los conciertos que ofrecieron en nuestro país cuando Gustavo Cerati estaba vivo; lo que aconteció la noche del martes en el Estadio Nacional fue una experiencia nostálgica y difícil de procesar.

Un escalofrío recorrió el cuerpo de los fans de la vieja guardia cuando se apagaron las luces y se inició el show ‘Gracias Totales’, con Gustavo Cerati cantando ‘Sobredosis de TV’ en la pantalla led tamaño natural, acompañado del bajo de Zeta Bosio y la batería de Charly Alberti, los compañeros que le sobreviven. Un paro emocional hizo presa a muchos, porque inmediatamente se vino a la memoria el último concierto que ofreció Soda Stereo como trío aquí en Lima, (también en el Nacional en el año 2007), cuando Gustavo Cerati lucía lleno de vida y feliz por la gira del reencuentro ‘Me verás volver’.

Esta vez no se escucharon las ‘¡Buenas noches Lima! que solía gritar al inicio del show, pero allí estaban, extrañamente, los tres integrantes de Soda Stereo juntos, otra vez, gracias a la tecnología y desafiando al umbral de la muerte. ‘Estar y no estar al mismo tiempo’ como bien dijo Zeta en la entrevista que concedió a La República horas antes.

Era extraño ver a Zeta y Charly compartiendo con otros artistas que no fueran Gustavo, mientras la gente más joven se tomaba selfies y grababa todo el concierto con sus teléfonos celulares. En cambio, la emoción para otros, como nosotros, se encendía y apagaba porque sonaban todas las canciones de Soda, pero no estaba Gustavo Cerati. Los momentos de felicidad eran fugaces, intermitentes y llenos de nostalgia como cuando Cerati aparecía en la pantalla cantando sus canciones, o cuando se proyectaban los videos antiguos de la banda, donde se veía a tres jovencísimos ‘Soda’ jugueteando detrás de cámaras.

En cuanto al show, algunos artistas invitados se sumaron por ratos a la emoción. Aunque, en honor a la verdad, fueron pocos los que consiguieron llenar −en algo−, el enorme vacío de Cerati sobre el escenario. Entre los más sobresalientes estuvieron Rubén Albarrán, con el tema ‘Lo que sangra’, y Gustavo Santaolalla, con el místico ‘Cuando pase el temblor’. También se hicieron presentes Richard Coleman, con ‘Hombre al agua’; León Larregui, con ‘Disco eterno’; Adrian Dárgelos, con ‘Trátame suavemente’; y Álvaro Henríquez con ‘El rito’, el primero de la noche que apareció con un video grabado.

Las mujeres también se sumaron al homenaje, aunque dos de ellas a la distancia, como la mexicana Julieta Venegas con ‘Signos’ y Andrea Echeverri, quien interpretó ‘Pasos’. La chilena Mon Laferte fue la única fémina que salió al escenario en forma presencial a cantar ‘Un millón de años luz’ acompañada de las guitarras de Richard Coleman, Roly Ureta, Zeta Bosio y su joven hijo Simón Bosio.

Benito Cerati, el vástago de Gustavo Cerati, también apareció en el ecran cantando ‘Zoom’ al igual que Walas (con ‘Juegos de seducción’), Draco Rosa (‘De remolinos’), Fernando Ruiz Díaz (‘Persiana americana’) y Juanes (‘Prófugos’).

Mientras todo esto transcurría, Zeta Bosio recorría inquieto el escenario con su bajo, coqueteando con sus compañeros guitarristas y tratando de llenar el vacío de los vocalistas que aparecían solo en la pantalla.

Metros más allá, Charly Alberti se imponía con la batería y luchaba contra la nostalgia. Hubo un momento en que su proyección en la pantalla led se juntó con la de Gustavo Cerati, grabada hace 13 años durante la gira ‘Me verás volver’, y no pudo evitar conmoverse.

El momento cumbre llegó cuando comenzó a sonar el tema ‘En la ciudad de la furia’ con la presencia de Gustavo Cerati, una vez más, en la pantalla led, mientras se proyectaba en los laterales el extraordinario video del tema grabado en 1989. Aquella impresionante vista de Buenos Aires desde el cielo, en el gran ecran, hizo aún más evidente la ausencia de Cerati y a la vez, su imponente omnipresencia, como si se tratara del hombre alado del que habla la canción y que ahora sobrevolaba el Estadio Nacional.

El final del concierto llegó con ‘De música ligera’ en la voz de Chris Martin, vocalista de Coldplay; quien, a pesar de aparecer también del otro lado, cerró entre aplausos la jornada. Lo que vino después fue la despedida de Charly Alberti y Zeta Bosio sobre el escenario, abrazados a su amistad de más de 30 años y al recuerdo del amigo y compañero al que no ‘verán volver’ nunca más. El desfile de los invitados y más abrazos antecedieron al silencio. Charly Alberti fue el primero en salir de escena visiblemente conmovido, al igual que cientos de fans que estaban allí observando el fin de un concierto de Soda Stereo sin Gustavo Cerati y sin escuchar en su voz el eterno “Gracias totales”!

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