Plantean reducir a 10% el IGV que pagan las mypes para "dinamizar la economía"

El congresista Jorge Luis Flores Ancachi, de Acción Popular, propone que se reduzca de 18% a 10% el IGV que pagan las micro y pequeñas empresas (mypes) con el objetivo de que tengan más liquidez para invertir, además de promover la formalización y "dinamizar la economía" en un contexto de recesión.

A detalle, el proyecto de ley 6826, sugiere que se reduzca a 12% el IGV a las medianas empresas, mientras que para las grandes el recorte sería hasta el 15%.

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Para la segunda categoría, ingresos generados por ventas de inmueble o valores mobiliarios, el impuesto disminuiría al 2%. En ninguno de estos casos se especifica cuál sería su vigencia.

También se dispone la suspensión del impuesto a las transacciones financieras (ITF) a toda clase de operación hasta el 31 de diciembre del año 2026. En tanto, el pago de detracciones estaría suspendido hasta el 31 de diciembre de 2024.

¿Cuál es la justificación de la propuesta?

En el documento se hace un recuento de todas las proyecciones que hay respecto a los resultados del PBI del 2023, que en su mayoría coinciden en que el año cerrará en rojo, así como otros indicadores importantes como el de la inversión privada que ―de acuerdo con el Banco Central de Reserva (BCRP)― caería 7,3%.

"La presente ley no genera ni implica ningún costo para el erario nacional. Por el contrario, genera los siguientes beneficios, por lo que tiene como objeto promover el incremento de la inversión de la pequeña y mediana empresa para dinamizar la economía en el territorio nacional; con la finalidad de asegurar que las micro, pequeñas y medianas empresas puedan seguir invirtiendo e incrementar su formalización para contrarrestar la recesión económica que aqueja nuestra economía nacional con la reducción de impuestos", se lee en el documento.

La iniciativa ya se encuentra en la Comisión de Economía para su evaluación. De aprobarse, pasaría al Pleno, en el cual se debatirá y votará. Cabe precisar que el Congreso ya aprobó una disminución del IGV para las empresas del sector restaurantes y hoteles, que actualmente pagan un 8%, lo que ha tenido un impacto en la recaudación anual.