La emergencia sanitaria desatada por la COVID-19 modificó el modo en que las empresas ejecutan sus actividades cotidianas, rigiéndose ahora al trabajo remoto.
Según Paola Chocano, directora ejecutiva de Career Partners Perú, cerca del 90 % de las organizaciones aplicaron el teletrabajo a raíz del confinamiento obligatorio, y el 35 % de estas – repartidas en rubros de recursos humanos, finanzas, tecnología de la información, servicio al cliente y marketing – ya tenían un plan o estrategia para darle continuidad a sus negocios.
‘’Mientras que el resto, tuvo que acomodarse en el camino para asegurar esta práctica (teletrabajo), la cual deja muchos beneficios tanto para las personas como para la misma empresa’’, sostiene Chocano.
Dentro de las mejoras para el capital humano, la empresaria sostiene que el trabajo remoto fomenta la creatividad, la productividad y reduce el estrés.
‘’El 99 % de los altos ejecutivos te dicen que la idea que cambió su negocio no la tuvieron en su oficina, sino dentro de su casa (…) y, por otro lado, al quedarse en ella, se enferman mucho menos y pese a que la presión se mantiene, uno se puede organizar mejor’’.
Otro de los puntos clave del teletrabajo es la reducción del ausentismo y las tardanzas – alimentadas principalmente por el caos vehicular -, así como el predominio de la confianza.
‘’Algunas empresas hicieron bien al permitir que su personal labore desde casa, lo cual genera mucha confianza, y otras se acogieron a malas decisiones, sin considerar que las personas a la hora de buscar trabajo quieren conocer si la empresa realiza buenas prácticas, y en situaciones como estas, dice mucho cómo la afrontaron’’, sentencia Paola Chocano.