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Sociedad

Mafias operan 450 bocaminas ilegales en la zona de Pataz

Crimen organizado. Gerente de minera Poderosa dice que autoridades solo han intervenido 25 de estos socavones y que en los últimos 2 años han sido asesinados 16 trabajadores.

Atentado. Mafias han derribado 14 torres hasta ahora. Foto: difusión
Atentado. Mafias han derribado 14 torres hasta ahora. Foto: difusión

En la zona de Pataz existen 450 bocaminas que son operadas por mineros ilegales, de las cuales solo 25 han sido intervenidas por las autoridades, denunció Pablo de la Flor, gerente de Asuntos Corporativos de la minera Poderosa, entidad que sufrió el derribo de dos torres de alta tensión y un enfrentamiento en el que murió un colaborador de la compañía y otros dos resultaron heridos.

Además, dijo que solo han incursionado en el 5,55% de esos socavones y que solo 4 de las 44 plantas ilegales identificadas donde se procesa el grueso de los minerales extraídos en la zona han sido intervenidas.

De la Flor explicó en RPP que el contingente de la Policía y soldados del Ejército acantonados en Pataz se ven limitados en su actuar por la falta de recursos del Ministerio Público. “Es una tarea pendiente”.

El derribo de las últimas dos torres de alta tensión, en la noche del jueves, generó preocupación en las autoridades locales y en la empresa, que ven comprometidas sus operaciones.

Y es que la caída de las estructuras metálicas interrumpió el suministro eléctrico en ocho niveles de la mina Santa María, afectando gravemente su funcionamiento y poniendo en peligro la seguridad de los trabajadores y la estabilidad económica de la región.

El atentado ocurrió pese a que en la zona hay 300 integrantes de la Policía y del Ejército que se suman a más de 1.000 trabajadores de la minera que se dedican a la seguridad.

Negocio millonario

En los últimos tres años, la minería ilegal ha transportado mineral que puede llegar a los dos 1.600 millones de dólares y eso explica cómo la minera Poderosa, en los últimos dos años, ha sufrido atentados en 14 torres de alta tensión y el asesinato de 16 trabajadores.

Pablo de la Flor enfatizó en que es muy importante poner esta situación en contexto, porque este atentado se produce luego de que el Congreso derogara la ley que permitía depurar el Registro Integral de Formalización Minera (Reinfo) a fin de combatir la minería ilegal y controlar el uso de explosivos.

“El Congreso tiene que depurar el Registro Integral de Formalización Minera (Reinfo), porque es el manto protector de los mineros ilegales”. De esta manera, estimó, se evitarán más atentados a la minera Poderosa y otras minas legales de la región.

Formalización minera

En esa misma línea, el ministro de Energía y Minas, Rómulo Mucho, manifestó la necesidad urgente de declarar en emergencia la formalización minera en el país y así legislar al respecto. Por eso consideró que el Estado ha sido “rebasado” por el “uso distorsionado” del Reinfo.

“Lo que sí nos corresponde (de manera) urgente es el replanteo de la estrategia de la formalización y la revisión inmediata del Reinfo”, afirmó.

Rómulo Mucho sostuvo que la necesidad de empezar con la revisión del Reinfo se debe a que la formalización “se ha vuelto un poco compleja” desde el momento en que esta labor está a cargo de las Direcciones Regionales o de las Subgerencias Regionales de Energía y Minas.

El alcalde de Pataz, Aldo Carlos Mariños, calificó de acto terrorista el atentado contra la minera La Poderosa y pidió al Gobierno, a través del Ministerio de Interior, que investigue el hecho para dar con los responsables.

PNP: Fueron dos hechos separados

El jefe de la III Macro Región Policial, general José Zavala, precisó que hubo dos hechos por separado. Uno fue el atentado a las dos torres y el otro ocurrió horas después en un enfrentamiento dentro de un socavón subarrendado por la minera Poderosa. “Estamos investigando de qué banda criminal se trata”, dijo el oficial.

Periodista profesional, egresado de la Escuela de Periodismo Jaime Bausate y Meza. Me gusta explicar, enseñar, compartir. A lo largo de mi carrera he cubierto casos resonantes que nos ha tenido más horas en la computadora que lo habitual, siempre aferrado a un estilo, que combina datos, análisis, entrevistas, crónicas.