Señalan que Wilson Cruz Galarreta dirige a más de 20 hombres armados dedicados al sicariato, la extorsión y el secuestro de ingenieros residentes, empresas de construcción, mineros informales y alcaldes. Crimen organizado en el Norte Chico, “Si te dijera el arsenal con el que caminamos, hasta a los militares les buscamos la guerra”. Esto es parte de un mensaje que la policía y la fiscalía han interceptado a una organización delictiva que desde el 2010 actúa con total impunidad en Barranca y Pativilca, en el llamado Norte Chico, a cuatro horas de Lima. PUEDES VER: Callao: joven fue asesinado en presunto ajuste de cuentas | VIDEO Se les conoce como "Los Patrones de Barranca" o "Los Chicos Malos de Pativilca". Según la Fiscalía y la Policía, sus jefes y miembros han hecho del sicariato, la extorsión, el secuestro, el asesinato, el tráfico de terrenos un negocio lucrativo, de tal manera que hoy manejan sus propias minas de oro. Construcción civil De acuerdo con las investigaciones de la Segunda Fiscalía contra el Crimen Organizado y la policía, a partir de una serie de reportajes publicados por La República en abril y mayo del 2014, esta asociación ilícita opera baja la pantalla de los sindicatos de Construcción Civil de Pativilca y Barranca, afiliados a la Confederación de Trabajadores del Perú (CTP) y reconocidos por el Ministerio de Trabajo, hasta el 2013. Sus víctimas principales son las empresas de construcción e ingenieros residentes en las obras públicas y privadas. Luego, también lo son los mineros informales que trabajan en el norte chico, a los que, indica la policía, extorsionan y secuestran para arrebatarles el oro que han obtenido con mucho esfuerzo. También se encuentran entre sus víctimas las autoridades políticas. Los alcaldes y regidores de Pativilca y Barranca también han tenido que pagarles cupos y brindarles la información municipal que ellos necesitan para sus actividades ilícitas: catastros, contratos de obras, direcciones de empresas e ingenieros. "Hola señor, le mandamos este regalo ya que Ud. es un ratero como nosotros, solamente que a Ud. le llaman alcalde (...) si avisa a la policía nosotros seremos los primeros en enterarnos, porque tenemos infiltrados por todos lados. Si avisa a la policía procederemos de otra manera...", dice uno de los mensajes que le dejaron a un alcalde. El jefe "Wilson" Basadas en el testimonio de las pocas víctimas que han denunciado, operaciones de inteligencia y colaboradores eficaces, la policía y la fiscalía han podido identificar plenamente a los cabecillas y principales integrantes de esta asociación ilícita. Hasta el momento se tiene a unas 20 personas, encargadas de la extorsión y el cobro de cupos. Hay muchos más, en proceso de verificación. Según las autoridades, el "capo" de esta organización es Wilson Aníbal Cruz Galarreta, alias "Wilson". Él se encarga de la planificación y ejecución de las actividades criminales: el cobro de cupos, las extorsiones, los secuestros y los asesinatos, dicen las autoridades. Su segundo en el mando era Juan Maximiliano García Pantoja (a) Machi, pero este fue asesinado en abril del 2015, cuando aparentemente buscó desligarse de la organización. Buscado y protegido "Wilson" organizó el sindicato Único de Trabajadores de Construcción Civil y Actividades similares de Pativilca- Buenos Aires Altos, el 2010. Cuatro años antes había salido de prisión por asalto y robo agravado. Actualmente también se presenta como empresario minero al frente de la empresa "Inversiones Cerro Dorado". El Ministerio del Interior relacionó, el año 2013, a su banda con la muerte del empresario minero Richard Félix Flores y sus guardaespaldas Carlos Romero Ventura (35) y Raúl Mejía Pérez (36), y desde entonces "Wilson" permanece escondido. Se dice que está protegido por jóvenes sicarios y abogados. Diario La República Sus brazos La policía también ha identificado a los lugartenientes de "Wilson" como José Luis Chávez Villanueva (a) "Cuy" en el "sindicato" de Pativilca y Jorge Jesús Sánchez Ramírez (a) "Chavo", en el de "Barranca". Ellos, señalan, personalmente, y secundados por gente armada con fusiles que se desplaza en camionetas 4x4, se encargan de cobrar los cupos y las extorsiones. Uno de los testigos los ha relacionado con el secuestro y la desaparición del minero informal Luis Alberto Flores Enríquez. Flores se negó a pagarles los cupos que le pedían y un día se lo llevaron en la maletera de un auto y nadie lo ha vuelto a ver desde entonces. Es lo mismo que ha pasado con otros mineros informales. Alguien se niega a pagar y un día desaparece. Las autoridades sospechan que los matan y entierran los cuerpos clandestinamente para burlar las investigaciones. Otras versiones indican que los mineros son obligados a ingresar a socavones abandonados. Luego, los sicarios dinamitan las entradas. Sin cuerpo no hay prueba del delito. La desaparición forzada de personas está tipificada para los aparatos organizados de poder, no para la delincuencia común. En otras ocasiones asaltan los campamentos mineros. Llegan en camionetas y disparan a los mineros informales para obligarlos a huir y apoderarse del mineral que han podido recolectar. "Chavo" también ha sido reconocido paralizando obras de construcción, hasta lograr que los empresarios paguen los cupos. Igual sucede con los mineros informales: "Los Patrones de Barranca" llegan armados y dispersan a los trabajadores de la obra a balazos. Así la obra se paraliza hasta que los ingenieros residentes los ponen en contacto con los empresarios para negociar el pago de los cupos. El dinero se entrega en efectivo o en giros bancarios a nombre de los cabecillas de la organización o de sus testaferros. Jóvenes armados Luego se ha identificado a los sicarios o "chalecos" de los cabecillas para los extorsiones, cobro de cupos y los asesinatos. Aquí aparecen Juan Carlos Gomero Leyva (a) "Calín", Pedro Luis Ascencios (a) "Mantequilla", Alfonso Valerio Barrantes Calderón (a) "Barrantes", Fidel Sinecio Gallegos Zamora (a) "Tío Fidel" y Pablo Laurente Carreño (a) "Pablo". Igualmente, Junior Antony Haro Saavedra (a) "Antony", Luis Ulises Gomero Leiva (a) "Lui", José Luis Silva Tolentino (a) "Pipa", Roger Pedro Inga Herrera (a) "Roger" o "Serrano", Jordan Alexis Mendoza Moreno (a) "Jordan". Además, William Richard Haro Saavedra (a) "Borrego", José Luis Changanaqui (a) "Pirulo", Juan Jesús Alberto Muñoz (a) "Cholo Juan" y Víctor Manuel Palomino Castro (a) "Nela". Diversos testimonios recogidos por las prensa refieren que en el sector de Buenos Aires y El Porvenir en Pativilca la organización reparte armas entre los jóvenes y los preparan como sicarios en un cerro. Los más avezados y fríos se convierten en sicarios y "chalecos" (guardaespaldas) de los cabecillas. "Todos los que cuidan a 'Wilson' son fieles a él como corderos de un rebaño", afirma uno de los testigos. El resto son repartidos como seguridad en las obras de construcción civil. Los jóvenes que no se enrolan en este ejército privado también le sirven a la organización como soplones o campanas. Los mototaxistas son los principales informantes de "Wilson" ante la llegada de extraños o cualquier información que puede ser de utilidad para la organización. "Los Patrones de Barranca" y de Pativilca pagan muy bien por la información. La fiscalía podría actuar pronto contra esta organización. Solo falta encontrar un juez dispuesto a hacer justicia y enfrentar al ejército de abogados que protegen a "Wilson". Sicariato y asesinatos en Pativilca que hasta ahora esperan justicia Pativilca es un pueblo sin industria y sin apoyo, que lamentablemente se ha convertido en 'ciudad dormitorio' de delincuentes de toda la provincia de Lima que lo utilizan como guarida", declaró el ex alcalde Uldarico Baldomero Castillo a La República en abril del 2014. La Policía de Pativilca y Barranca se ha visto rebasada por esta organización y, ya sea por temor o corrupción, han mirado a otro lado, ante los asesinatos, las extorsiones y la captación de jóvenes para el sicariato. Las autoridades tienen evidencias de que Wilson Cruz Galarreta y Jorge Sánchez Ramírez ordenaron el asesinato del dirigente de construcción civil de Barranca Daniel Rivera Pajuelo, quien resultó gravemente herido en un atentado en mayo del 2015, hecho ocurrido en la Panamericana Norte. Rivera había denunciado en Lima la infiltración de delincuentes en los sindicatos de construcción civil de Pativilca y Barranca. El sicario que disparó al dirigente de construcción civil le gritó: "Ahí está, por soplón, para que no te vuelvas a meterte con el "Chavo", ni con el "Wilson".