Beneficiado. Sala Penal de Apelaciones redujo condena del responsable de 'narcoindultos', de 13 años y 8 meses de cárcel a nueve años, solo por el delito de cohecho pasivo propio.,El ex presidente de la Comisión de Gracias Presidenciales Miguel Facundo Chinguel podría recuperar su libertad dentro de un año, dos a lo mucho. Ayer, la Primera Sala Penal Nacional de Apelaciones le redujo la condena por el caso de los narcoindultos, de 13 años y ocho meses, a solo nueve años de prisión. PUEDES VER: Todo lo que debes saber sobre la condena de Miguel Facundo Chinguel por los Narcoindultos Facundo Chinguel está recluido en el penal de Ancón 2, desde el 23 de junio del 2013, lo que a la fecha supone tres años, un mes y tres semanas en prisión, de tal manera que en un año más estará en condiciones de pedir su libertad con beneficios penitenciarios. Por esto tal vez ayer Facundo Chinguel estaba emocionado, abrazaba a su abogado y levantaba el pulgar en señal de conformidad, luego de que el juez Rómulo Carcausto diera a conocer la decisión unánime del tribunal de apelaciones. No fue organización El fallo de segunda instancia es inapelable, de acuerdo con el nuevo Código Procesal Penal. La fiscalía o la procuraduría podría buscar que la Corte Suprema vuelva a revisar el caso vía una casación, pero la posibilidad de que esto suceda es ínfima. El doctor Carcausto leyó una síntesis de la sentencia. El texto íntegro del veredicto fue notificado por escrito a los abogados defensores, la fiscalía y la procuraduría anticorrupción. Junto a Carcausto, firmaron la sentencia las doctoras Edita Condori y Sonia Torre Muñoz. Los jueces indicaron que la fiscalía no probó que en los narcoindultos interviniera una organización ilícita, sino que todo fue obra personal de Facundo Chinguel. Al respecto, precisaron que había que diferenciar la asociación ilícita de la Comisión de Gracias Presidenciales, que es un organismo lícito y que la fiscalía no había diferenciado entre ambos. Por esto, la Sala absolvió a Facundo Chinguel del delito de asociación ilícita y solo lo condenó por el delito de cohecho, recibir dinero para tramitar cuatro casos de conmutación de pena a narcotraficantes. Los únicos casos en los que, de acuerdo con el tribunal, se pagó dinero fueron de los internos, el peruano Lorenzo Toledo Leyva, el checo Eugene Csorgo y de los colombianos Ramiro Castro Mendpza y Henry Guzmán Ortiz. En primera instancia, Facundo fue condenado por solo dos casos de narcoindultos: el de Csorgo y Toledo Leyva. La Sala de Apelaciones consideró probados otros dos casos, sin más repercusión en la cantidad de años de la condena. Así el ex presidente de la Comisión de Gracias Presidenciales fue el único condenado. Los otros miembros de la comisión acusados por la fiscalía: Noelia Roxana Gómez Paulet, Manuel Carrera Toribio, Dámaso Luyo Vicente, Fredy Vilela Mijahuanca, Jaime Acevedro Saavedra y Fabiola Ojeda Julca fueron absueltos de todos los cargos. En la primera parte de la sentencia los jueces alegaron que las entrevistas e informes periodísticos si bien pueden informar de un hecho criminal, no puede considerárseles una prueba, pues no tienen el rigor de una declaración ante una autoridad. Los jueces hicieron esta precisión para descartar como prueba la declaración a los medios de Carlos Butrón Dos Santos (a) "Brasil" sobre la existencia de una organización ilícita en la Comisión de Gracias Presidenciales. Abogado de Facundo Chinguel acudirá a la Corte Suprema "Hemos logrado un fallo bastante importante, la Sala Penal de Apelaciones ha determinado que Miguel Facundo Chinguel nunca dirigió alguna organización criminal, nunca existió una banda que se instaló en la Comisión de Gracias Presidenciales y nunca hubo un grupo de personas al mando de Facundo Chinguel que cobrara dinero por conmutaciones. Este es un dato sumamente importante por el que luchamos y hoy la sala nos ha dado la razón", comentó el abogado defensor Benji Espinoza. El abogado de Facundo Chinguel anunció que acudirá a la Corte Suprema para demostrar que no hubo ningún caso de cohecho y se mostró confiado en ser escuchado y lograr un fallo más favorable todavía.