Omisiones. El exprocurador Yván Montoya advierte que hasta ahora ninguna fórmula presidencial ha presentado una propuesta integrada para reducir la corrupción, y solo se dedican a hacer anuncios para obtener votos.,Aunque todos los candidatos a la Presidencia de la República han ofrecido de forma general luchar contra la corrupción, hasta ahora ninguno ha presentado un plan con medidas concretas para enfrentarla. Apenas han anunciado algunas acciones aisladas como parte de su estrategia para captar los votos de la población. PUEDES VER: ONPE: se debe analizar posible reforma para regular la publicidad electoral Así, un día antes de Nochebuena, el líder de Peruanos por el Kambio, Pedro Pablo Kuczynski (PPK), recorrió Arequipa y planteó la “muerte civil” para los sentenciados por corrupción, sumándose así a la propuesta que el candidato electoral de Alianza Para el Cambio, César Acuña, lanzó durante su exposición en la última reunión de ejecutivos CADE. En este mismo encuentro, la lideresa de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, quien encabeza las encuestas, aseguró que a ella no le temblará las manos para luchar contra la corrupción pero sin adelantar las acciones que tomaría un eventual gobierno suyo. Mientras que el candidato aprista Alan García se mostró a favor de fortalecer la Contraloría y contrario a la inmunidad presidencial y parlamentaria; y el postulante por Perú Posible, Alejandro Toledo, dijo que los gobernantes deben rendir cuentas a la ciudadanía. El exprocurador anticorrupción Yván Montoya, alertó que estos anuncios son propuestas aisladas para obtener votos, así como lo es la inclusión en sus equipos de personajes vinculados a la lucha contra la corrupción, como la exprocuradora Yeni Vilcatoma, que paradójicamente ha pasado a las filas del fujimorismo. Señaló que se requiere de una propuesta integrada, que incluya tres aspectos: uno preventivo educativo, que tiene que ver con políticas para llegar a la población; otro preventivo administrativo, que implica la facultad para proponer reformas constitucionales y recomendaciones vinculantes; y un tercero, punitivo, como la propuesta de la muerte civil o el fortalecimiento e independencia de Procuradurías Anticorrupción y de Lavado de Activos, entre otras acciones. “Solo así podremos esperar que a mediano plazo se registre una disminución de actos de corrupción”, sostuvo. Montoya, coordinador del Proyecto Anticorrupción del Instituto de Derechos Humanos de la Pontificia Universidad Católica del Perú (IDEHPUCP), remarcó que de otra manera solo se aplica una política de “parches”. “Así solo logramos resistir el embate de la corrupción, pero no combatirla, para lo cual tendríamos que ir dos pasos adelante, a fin de reducirla sustancialmente”, dijo. Con acusaciones El exprocurador calificó de “sorprendente” que los primeros cinco candidatos presidenciales con mayor intención de voto tengan algún tipo de acusación o investigación por delitos vinculados con la corrupción o al lavado de activos. Por ejemplo, Keiko Fujimori tiene denuncias sobre aportes fantasmas a su campaña presidencial de 2011 y serios cuestionamientos sobre el dinero que usó para estudiar en los Estados Unidos; sobre Alan García pesan varios informes de la Megacomisión, como los “Narcoindultos”; César Acuña tiene 80 investigaciones en el Poder Judicial por su gestión como alcalde de Trujillo; Alejandro Toledo tiene una investigación preliminar por el caso Ecoteva; y a PPK se le achaca haber tomado decisiones que beneficiaron a la empresa Hunt Oil, a la que asesoró antes de ser ministro de Economía. Según Montoya, el respaldo que los candidatos tienen de la población, a pesar de estos temas, es porque hemos llegado a un nivel en el que el peruano siente que es inútil denunciar a los corruptos, y han aprendido a convivir en este sistema. Datos Unanimidad. Varias personalidades de la política y la cultura han exhortado a los candidatos a luchar contra la corrupción. Reflexión. El obispo emérito de Chimbote, monseñor Luis Bambarén, pidió “que se comprometan con el Perú, no con sus bolsillos”.