La aún no promulgada ley de búsqueda de desaparecidos.,El presidente Ollanta Humala no debería dejar pasar la oportunidad de promulgar la ley de búsqueda de personas desaparecidas que está en su despacho desde hace tres semanas, pues se trata de un instrumento legal que puede contribuir a terminar con tres décadas y media de duelo sin fin de los familiares de unas quince mil personas desaparecidas durante las dos décadas del terror sufridas en el Perú desde inicios de los ochenta. El proyecto de ley de búsqueda de personas desaparecidas fue aprobado por el pleno del Congreso el jueves 26 de mayo gracias a un resultado de 68 votos a favor, cuatro abstenciones y ninguno en contra, a partir de una iniciativa formulada por la Defensoría del Pueblo. Como informó al día siguiente La República, esta ley plantea una ayuda humanitaria para los familiares de las víctimas del terrorismo que desaparecieron durante los años de la violencia en el Perú. Asimismo, la norma establece que el Ministerio de Justicia debe liderar la búsqueda de los desaparecidos, para lo cual se debe crear el Registro Nacional de Personas Desaparecidas que ejecutará sus funciones 90 días después de la vigencia de la ley. Pero tres semanas después de aprobado el proyecto en el Congreso, el presidente Humala no la ha promulgado y ni siquiera se ha pronunciado sobre el tema para conocer su posición o hasta el motivo de la demora de un instrumento legal indispensable para atender las legítimas demandas de un gran número de deudos de los desaparecidos que viven un duelo sin fin. Como señala un reciente reporte de Noticias SER, la búsqueda de las personas desaparecidas y la entrega de los restos a sus familiares constituye una misión ineludible del Estado peruano no solo para restaurar, en parte, la dignidad de los peruanos desaparecidos sino, también, la dignidad de los deudos con el fin de empezar a dejar en el pasado el verdadero calvario que sufrieron al recorrer hospitales, morgues, cementerios, bases militares, cuarteles, comisarías y prefecturas sin encontrar rastro de sus parientes. En las postrimerías de su mandato, el presidente Humala cometería un grave error de injusticia social si elude la responsabilidad de promulgar una norma humanitaria que fortalece la dignidad de las personas desaparecidas y de sus familiares, con el fin de poner en marcha, cuanto antes, el trabajo asignado por la ley al Ministerio de Justicia, y que este sea culminado al inicio del mandato del nuevo gobierno del presidente Pedro Pablo Kuczynski.