Controversia por incremento del presupuesto para Educación

Una nueva discrepancia entre los poderes del Estado ha provocado la reciente aprobación del Pleno del Congreso de una reforma constitucional que establece el presupuesto del sector Educación en no menos del 6% del producto bruto interno (PBI). Esta propuesta, para el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), carece de sustento técnico y tiene visos de inconstitucionalidad.

Cerca de la medianoche del lunes, el Parlamento aprobó el dictamen que modifica el artículo 16 de la Constitución “para fortalecer y asignar presupuesto al sector Educación”. Votaron a favor las bancadas de Alianza para el Progreso (APP), Frepap, Unión por el Perú, Podemos Perú, Somos Perú, Frente Amplio y Acción Popular. Queda pendiente la segunda votación.

En la actualidad, el presupuesto del sector representa el 3.8% del PBI, lo cual asciende a 31 mil millones de soles. El mayor porcentaje se registró el 2015, cuando alcanzó el 4%. Estos montos los define el MEF.

Pues bien, el análisis técnico del dictamen, el cual incorpora la iniciativa del legislador de APP y primer vicepresidente del Congreso, Luis Valdez, hace referencia a la prueba PISA, las brechas en tecnología e infraestructura y los bajos niveles de productividad.

“Esto hace de carácter imperativo la intervención del Congreso”, se lee en la norma. Agrega que “no genera costos para el sector Educación”.

Sin embargo, la titular del MEF, María Antonieta Alva, dijo que esta modificación del Congreso en lugar de ser un aporte es un “obstáculo” en la reforma educativa y, en una situación de pandemia, afecta el presupuesto público, el cual debe ser sustentable y responsable.

Según indicó, cualquier medida que aumente el gasto público impacta en la sostenibilidad fiscal y transgrede la Constitución, la cual señala que el Congreso no tiene iniciativa de gasto. “Educación es uno de los sectores con más asignación presupuestal, incrementándose en 14% del 2018 al 2020”.

Posiciones

El ministro de Educación, Martín Benavides, sostuvo que fijar con anticipación el PBI puede ser un “peligro”, ya que no solo depende de su sector, sino de las necesidades de los otros.

Para el investigador principal de Grade, Hugo Ñopo, dicha iniciativa es inviable ya que quien recauda y señala el gasto no es el Congreso, sino el MEF.

Según detalla, las tres cuartas partes del presupuesto se destinan al salario de los maestros, por lo que un incremento del 6% del PBI significaría subir este en un 80%, lo cual es necesario, pero también requiere que sea en función de la meritocracia. "El PBI fluctúa mucho, por lo que si este cae, también se tendría que recortar el sueldo a los docentes. ¿Eso es viable?".

Por su parte, el Sutep saludó la medida, ya que, según refiere, pese a que había sido dispuesto en el Acuerdo Nacional (2002) y la Ley General de Educación, el Gobierno incumplía con elevar al 6%. "Al estar en la Constitución se convierte en un imperativo, y si no lo cumplen es una infracción constitucional", afirmó su dirigente Lucio Castro. Agrega que el incremento debe destinarse a infraestructura, investigación, alimentación y revaloración del magisterio, cuyo salario es uno de los menores en la región.

Reacciones

Ricardo Cuenca - Inst. de Estudios Peruanos

“El porcentaje del PBI para Educación es un indicador de gasto y no una meta. Es una muletilla con poder comunicacional, pero no soluciona el principal problema de desigualdad en la educación”.

Lucio Castro - Sec. general del Sutep

“La educación pública se ha precarizado. No la toman en cuenta en los debates de presupuesto. Esta medida es viable y constitucional. Para noviembre ya deberían destinar el 6% del PBI al sector”.

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