Callao: médicos son violentados al atender emergencias de reos
El hospital Daniel Alcides Carrión atiende a pacientes que provienen del penal Sarita Colonia del Callao. Esta situación pone en riesgo la integridad de los galenos.
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La violencia se ha instaurado en la sala de emergencia del hospital Daniel Alcides Carrión. Los médicos y enfermeros están prestos ante cualquier emergencia médica durante el transcurso del día y la guardia. Sin embargo, al nosocomio del Callao también llegan reos que violentan no solo al personal médico, sino también a los pacientes.
Según Panorama, durante las guardias médicas, llegan hombres heridos de bala que están resguardados por los custodios del Instituto Nacional Penitenciario (INPE). Sin embargo, esta seguridad es parcial, puesto que los galenos están a merced de la agresión de los delincuentes heridos.
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Ante esta situación adversa que viven los médicos y enfermeros en sus guardias, los reos deben ser igualmente atendidos en casos de emergencia, porque están en su derecho. Ellos provienen del penal Sarita Colonia del Callao.
El doctor Esteban Ferrando, médico emergencista del hospital Daniel Alcides Carrión, se refirió a la violencia que se ha instaurado en la sala de emergencia de su centro de labores. “Lo malo que tenemos en el Callao es la violencia, lo que vemos a diario son los pacientes baleados y otros que vienen por agresiones. Hay momentos que se puede hacer algo, pero hay otros momentos que ya no podemos hacer nada”, sostuvo.
Para que un delincuente pueda ser atendido de emergencia en el hospital Daniel Alcides Carrión, se tiene que cumplir un protocolo. De no hacerlo, el reo se puede fugar.
El protocolo de seguridad dicta que se debe atender a un reo con un custodio del INPE al lado. Además, deben utilizar permanentemente 2 grilletes: uno en las piernas con una cadena que impida separarlas para correr y otras esposas que los sujetan a la silla de ruedas o su camilla. Cabe mencionar que el personal policial permanece todo el tiempo junto al delincuente.
Un hombre herido de bala llegó al hospital Daniel Alcides Carrión. El paciente dijo que fue víctima de un asalto y que al resistirse le dispararon dos veces. Uno de los proyectiles atravesó su muslo, el otro quedó alojado en su pantorrilla.
El doctor Aybar, médico traumatólogo del hospital Daniel Alcides Carrión, explicó los riesgos que puede sufrir un paciente al ser herido de bala. “Llegó una señora con una bala que estaba totalmente dentro del hueso. Era en la rodilla, ahí se quedó dentro del hueso. Sacar la bala pudo haber causado graves daños en la paciente. De cada 100 balas, probablemente 80 las dejemos ahí”, indicó.
Al centro médico llega todo tipo de pacientes: desde el desamparado que necesita unos soles para comprar medicamentos e incluso la población carcelaria. Los médicos trabajan más de 25 años con la adrenalina al límite. Algunos de ellos manifiestan que es su razón de vivir.
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