Opinión | Un líder para el diálogo ante conflicto Tía María
Opinión | Algo que parece no ver el Gobierno es que crece el descontento también en otros departamentos con problemas con la Southern y otras mineras.
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Eduardo Ugarte / Periodista
El 26 de junio, este diario publicó los resultados del sondeo de opinión del grupo Idessia, en los que el 62.2% rechazaba la licencia a Tía María, el 34.36% estaba de acuerdo con la minería en el valle de Tambo y el 2.75% no opinaba. Se aplicó a 436 ciudadanos de 13 distritos, con más del 70% de arequipeños. “Si el resultado es adverso en la ciudad, ¿cómo será en la provincia de Islay?, se preguntó el analista Federico Rosado. En Islay, concretamente en el valle de Tambo, hubo oposición a la actividad de Southern con el estallido de dos conflictos sociales en 2011 y 2015, que dejaron siete muertos, 300 heridos, miles de pérdidas económicas y una polarización entre sus habitantes”.
Ese mismo día, en el mismo diario, se anunciaba que el gobernador de Arequipa, Elmer Cáceres Llica, afirmaba en Tambo que “sin licencia social no hay permiso para el proyecto de Southern”. Sin embargo, el Gobierno dio la licencia a la minera y el valle inició un paro indefinido con bloqueo de carreteras y cierre de mercados, que mantiene aislado al sur afectando sus actividades comerciales e impidiendo el traslado de mercadería a Chile y Bolivia.
El gobernador Cáceres exige la anulación de la licencia y responsabiliza al presidente Martín Vizcarra por las consecuencias del paro que puede llegar a costar vidas. El presidente ha dicho que “no se hará Tía María si antes no se aclaran las dudas de la población” y, el viernes, en su paso por Arequipa, agregó que el Ejecutivo está dispuesto al diálogo, pero sin condiciones, y que quiere conversar con las autoridades y la sociedad civil cuando sea propicio viajar al valle de Tambo.
Mientras tanto, algo que parece no ver el Gobierno es que crece el descontento también en otros departamentos con problemas con la Southern y otras mineras. Ante esto y tomando la palabra al presidente para dialogar con las autoridades y la sociedad civil, es que desde esta columna proponemos que el alcalde provincial Omar Candia asuma la responsabilidad de facilitar el diálogo, liderando a la sociedad civil para evitar una crisis de graves consecuencias.
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Esta opinión, compartida con otros ciudadanos, se basa en la postura serena, conciliadora y de alerta que ha tomado el alcalde Candia desde el inicio del conflicto. Además, puede conversar con otros alcaldes y representantes de la sociedad civil organizada y crear un clima propicio para el anunciado diálogo, con lo cual se eviten mayores consecuencias que tenemos a la vista, como ha ocurrido en el pasado reciente.
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