Una casación para recordar
Se definió en la Corte Suprema que crimen de Inti y Bryan fue grave violación de DD. HH.
La Sala Penal Permanente de la Corte Suprema definió que el caso de Inti Sotelo y Bryan Pintado, así como de los 78 lesionados durante los graves incidentes del 14 de noviembre del 2020, constituye un caso de violación grave de los derechos humanos, prohibida por el derecho internacional.
En ese marco, la sentencia de la Suprema establece que el caso tendrá que ventilarse en la Corte Superior Nacional de Justicia Penal Especializada y no en la Corte de Lima, donde se estaba desarrollando.
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La muerte de los dos jóvenes fue producto de violencia policial indiscriminada y excesiva, que buscaba acallar la protesta en las calles por la ilegal presencia de un gobierno usurpador, encabezado por Manuel Merino de Lama, quien se vio obligado a dejar rápidamente el poder ante la presión de las calles.
En medio de la convulsión social y las protestas, especialmente de los jóvenes, se produjeron estos incidentes que terminaron con la muerte de Inti y Bryan, y decenas de heridos de perdigones alojados en los ojos o en la columna vertebral. Por ello, hay varias víctimas que han perdido la vista o la facultad de caminar, o han quedado con secuelas permanentes.
Pese a varias intentonas para evadir responsabilidades o blindarse ante los procesos judiciales, esta nueva corte tendrá que investigar a los once altos mandos policiales que tendrán que responder acerca del homicidio de ambos jóvenes y las lesiones de los otros 78 afectados.
Es evidente que se está queriendo rescribir la historia reciente, pero quedan grandes interrogantes sobre la participación del excongresista Merino de Lama y los ministros que fueron convocados para formar su gobierno. Hay órdenes que se impartieron a la policía para que actuara con tanta violencia . Queda saber la identidad de quién dictó la orden y cuál fue su motivación.
Es una buena noticia esta decisión de la Corte Suprema, que llega para renovar las esperanzas de los deudos y de los heridos y sus familias, en la justicia. También la ciudadanía celebra que se proceda en esta dirección, que nos aleja de la impunidad y la ilegalidad. Son estos fallos los que permiten renovar la confianza en la democracia y el Estado de derecho.
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