Precio del dólar HOY, martes 7 de mayo

Castillo es un tremendo embustero

El presidente es un fraude para los peruanos. Debe irse ya.

El esfuerzo bien intencionado del cardenal Pedro Barreto y el psicoanalista Max Hernández para hacer entrar en razón a Pedro Castillo para que haga un gobierno mínimamente viable fue valioso pues confirmó a quienes aún tenían esperanza de enmienda que este presidente es un gran embustero que debe renunciar cuanto antes.

Barreto dijo que esta era “la última oportunidad” de Castillo, y este volvió a confirmar que es un perdedor empedernido de oportunidades. Hoy piden su renuncia el Sutep, los comandos Chavín de Huántar, y hasta gran parte de la izquierda que, hasta hace poco, tenía la ilusión de que ocurriera una rectificación al mamarracho que protagoniza desde hace nueve meses.

No había fundamento para creer que esta vez sería diferente, pues ya es claro –como lo ha sido para esta pequeña columna desde el inicio de su gobierno penoso– que Castillo tiene una dependencia emocional e intelectual de Vladimir Cerrón pues es un pelele sin opinión ni conocimiento de nada, además de un embustero que cree que puede mentir sin que nadie se dé cuenta.

Su mentira a Barreto y Hernández era previsible no solo por su trayectoria sino porque, después de asegurarles la enmienda, seguía nombrando delincuentes e ignorantes en el gobierno, y no deslindaba del troglodita, oportunista y alocado premier Aníbal Torres.

Castillo vuelve a proponer el cambio de constitución –una prioridad solo para el 8% de los peruanos– como una patada hacia adelante que solo acelerará el final de su penosa presidencia, y que confirma su farsa con un salto al abismo al plantear una ‘solución’ que no soluciona nada. Eso es un fetiche antiguo de una izquierda peruana confundida que siempre apuesta por la consigna ignorante: no saben ni siquiera para qué cambiar la constitución.

La izquierda ha sido liquidada por su oportunismo de respaldar hasta el suicidio a un presidente mediocre y corrupto. Fue su cómplice y verdugo.

Este presidente es un tremendo embustero –además de un mediocre y un ladrón camuflado de maestro rural y campesino– para todos los peruanos, pero, principalmente, para los más pobres que, desde hace tanto tiempo, esperan un gobierno que los represente de verdad. Pedro Castillo debe irse ya.

La República

Los artículos firmados por La República son redactados por nuestro equipo de periodistas. Estas publicaciones son revisadas por nuestros editores para asegurar que cada contenido cumpla con nuestra línea editorial y sea relevante para nuestras audiencias.