Las 10 personas que se declararon culpables de ser agentes extranjeros en EE.UU., entre ellos la periodista peruana Vicky Peláez , no estaban a la vista del público al día siguiente de ser canjeados en Viena por cuatro rusos. Los canales nacionales de televisión controlados por el gobierno reportaron de modo conciso el intercambio , sin el patriotismo que pudo haber acompañado a una historia de este tipo. La sencillez en el tratamiento dado a la noticia podría ser en sí mismo una estrategia que refleja el deseo del Kremlin de pasar la página, ante el temor que el caso pueda perjudicar los esfuerzos por mejorar las relaciones con Washington. Poca difusión Ningún canal de televisión nacional transmitió el aterrizaje del avión el viernes, aunque las agencias de noticias internacionales tenían la filmación. Los periódicos fueron más expresivos, pero poco halagüeños. "Un éxito extraordinario en la lucha contra el espionaje mundial: rusos intercambiados por rusos", señaló con sorna el periódico izquierdista Sovietskaya Rossiya en un titular. También destacó que el canje demuestra que "un agente estadounidense tiene el mismo valor de dos agentes y medio rusos". Moskovsky Komsomolets, uno de los periódicos más populares de Rusia, colocó la noticia de los espías por debajo de la historia de un pulpo y un perico que supuestamente pronostican los resultados de la Copa Mundial de fútbol. Serían reclutados El articulista de prensa Alexander Khinshtein señaló con molestia que los cuatro agentes entregados por Rusia serían recibidos con los brazos abiertos en Occidente. "Habrá un revuelo en torno a ellos; todos querrán estrechar las manos de los héroes, invitarlos a almorzar y cenar... el saboteador (Igor) Sutyagin será recibido por congresistas", escribió. El periódico Komsomolskaya Pravda se centró en el destino de dos espías rusos enviados a Gran Bretaña, y enterró la llegada de Anna Chapman, Mijail Semenko y otros ocho unos párrafos más bajo. El ex agente de la KGB Vladimir Rubanov dijo a la versión digital del periódico Gazerta que los espías podrían ser reclutados como profesores de futuras generaciones de espías , aunque hayan obtenido poca información de utilidad y al final fueran arrestados. (Con información de AP)