Joe Biden inicia su gobierno con el reto de recuperar la unión de EE. UU.

Joe Biden y Kamala Harris, el presidente más longevo en la historia de los Estados Unidos y la primera vicepresidenta mujer de orígenes africanos e indios, hicieron historia la tarde del último miércoles al jurar a sus cargos y dar inicio a una nueva administración que llega a la Casa Blanca para unificar a un país enteramente dividido por el racismo y golpeado por los devastadores efectos de la pandemia del coronavirus.

“La democracia ha prevalecido”, dijo en su discurso inaugural el flamante mandatario frente a un público limitado de aproximadamente 1.000 personas. “Hoy celebramos el triunfo no de un candidato, sino de una causa, la causa de la democracia. Se ha escuchado la voluntad del pueblo”, agregó.

Bajo el cuidado de un blindaje militar fuertemente armado que resguardaba la sede del Capitolio, Biden se refirió a las amenazas de ataques perpetrados por grupos radicales ligados al presidente saliente Donald Trump. “Aquí estamos apenas unos días después de que una turba desenfrenada pensara que podía (...) expulsarnos de este terreno sagrado. No sucedió, nunca sucederá, ni hoy, ni mañana, ni nunca”, enfatizó.

Luego del discurso, una serie de actos protocolares acompañaron la ceremonia, entre ellos estuvo la declamación del poema “The Hill We Climb” (La colina que subimos), interpretada magistralmente por Amanda Gorman, quien se convirtió en la poeta más joven en actuar en una investidura presidencial y con sus palabras conmovió al público. La ex primera dama Michelle Obama destacó la presentación en Twitter.

Importantes mandatarios del mundo hicieron llegar a la nueva administración Biden-Harris sus saludos y felicitaciones. Asimismo, le mostraron el interés de trabajar juntos. Uno de ellos fue el presidente peruano Francisco Sagasti e incluso el mismo Jair Bolsonaro, aliado del saliente Trump, también mostró su deferencia.

El papa Francisco aseguró que Dios guiará los esfuerzos de Biden para fomentar el entendimiento, la reconciliación y la paz en Estados Unidos y el mundo.

Adiós, Trump

Al promediar las 8.30 de la mañana, Donald Trump salió de la Casa Blanca de la mano de su esposa Melania para ir en el helicóptero Marine One hacia la Base Andrews, donde se dirigió por última vez a los estadounidenses.

“Son un pueblo increíble y este es un gran país, ha sido el gran honor de mi vida haber sido vuestro presidente”, dijo frente a un limitado grupo de personas que acudió a su encuentro para despedirlo.

Para tratar de limar asperezas con la administración de Biden, el exmandatario dijo que rezaba por que le vaya bien a la nueva gestión y que esta tenga mucho éxito. Además, amenazó con regresar “de alguna u otra manera”.

Por su parte, Joe Biden mencionó que Trump le dejó una carta “generosa” en el Despacho Oval, cumpliendo con una tradición del cambio de mando.

“El presidente me dejó una carta muy generosa. Debido a que es algo privado, no voy a hablar del tema hasta que converse con él”, dijo el demócrata a los periodistas.

El expresidente Trump pasará sus días en su residencia en Mar-a-Lago, Florida. La tranquilidad puede que sea efímera, pues en los próximos días deberá enfrentar un segundo proceso de juicio político y renovar el partido republicano.

Acciones ejecutivas en el primer día como presidente

Ampliar las moratorias de desalojo y de ejecución de hipotecas.

Extender la pausa en los pagos de los préstamos estudiantiles hasta el 30 de setiembre del 2021.

Volver al acuerdo de París sobre el cambio climático.

Revocar el permiso del oleoducto Keystone XL, moratoria de las actividades de arrendamiento de petróleo/gas en el Refugio Nacional de Vida Silvestre del Ártico, abordar la crisis climático.

Defender el programa “Dreamers”.

Revertir la prohibición de viaje para musulmanes.

Detener la construcción del muro a lo largo de la frontera con México.

Cambiar la estricta política migratoria de Trump.

Postergar la salida forzada de un grupo de libertarios.

Lanzar una iniciativa para promover la equidad racial.

Revocar el plan de Trump para excluir a los no ciudadanos en el registro del censo de EEUU.

Combatir la discriminación basada en la identidad de género o la orientación sexual.

Memorando presidencial por el que se retiran las órdenes ejecutivas de último minuto del proceso de reglamentación de la administración Trump.

Restablecer y mantener la confianza de la opinión pública en el gobierno (compromiso ético para los nombramientos del Poder Ejecutivo).

Iniciar el “reto de los 100 días de mascarilla”.

Volver a la Organización Mundial de la Salud.

Reestructurar la coordinación del gobierno federal ante la pandemia del coronavirus.

“Vamos a combatir el cambio climático de una forma que no habíamos intentado hasta ahora”, dijo Biden a los periodistas tras firmar los decretos que incluyen medidas de protección medioambiental, pero también normas para luchar contra la pandemia del Covid-19.

Los aliados internacionales de la Unión Europea e incluso la OTAN celebraron las nuevas acciones que tendrá la gestión entrante a favor de promover la unión entre la mayor potencia del mundo junto con ellos, una acción que trató de debilitar Trump.

Nuevas esperanzas para Latam

Por: Antonio Camborda, internacionalista

A pesar de los contratiempos y maniobras antidemocráticas tramadas por Donald Trump, ayer pudo jurar ante un juez supremo para ejercer la presidencia de los Estados Unidos Joe Biden, el mandatario número 46.

La ceremonia fue un acto sencillo, pero lleno de significados. En primer lugar, el mensaje de Biden fue un llamado a la unidad de todos los estadounidenses, a respetar el deseo y la voluntad de la mayoría, y, además, de respetar escrupulosamente la Constitución de los Estados Unidos.

De esta manera, quedaba atrás el discurso de odio, de división de los ciudadanos, de discriminación racial y por origen de nacionalidades, que durante 4 años mantuvo Trump.

Hay dos temas pendientes también: la forma de combatir con éxito la pandemia del coronavirus y la crisis económica que atraviesa el país.