Ya te habíamos contado hace unas semanas sobre los problemas que vienen pasando las compañías y desarrolladoras de videojuegos debido a la escasez de componentes y microchips para producir nuevas consolas. Por ejemplo, tan difícil es conseguir un Xbox Series X, que un torneo oficial de Halo Infinite tuvo que recurrir al uso de dev kits, mejor conocidos como equipos de desarrollo, para la realización de su evento.
Este suceso aconteció esta semana durante el Championship Series del popular shooter de Microsoft, el cual tuvo diversos problemas para adquirir estas consolas de última generación y no tuvo mejor idea que cambiarlos por el equipo retail durante el evento. El caso no quedó impune y miles de usuarios utilizaron sus redes sociales para criticar la falta de profesionalismo por parte de los organizadores.
Tahir Hasandjekic, líder de deportes electrónicos de 343 Industries, quiso esclarecer el asunto y calmar las aguas sobre el revuelo que se estaba produciendo ante la noticia, afirmando que los jugadores habían sido advertidos que tendrían que utilizar dev kits de la última versión de Xbox durante el campeonato, a lo que la gran mayoría estuvo de acuerdo previamente al inicio de las partidas.
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En tanto, el CEO de Intel, Patrick Gelsinger, asegura que el dilema continuará hasta el 2023, junto con la demanda exponencial, pues la falta de artículos gamer ha afectado a toda la nueva generación de tecnología; sea computadoras, consolas, teléfonos inteligentes, e incluso carros y electrodomésticos.