No cabe duda de que las protestas de los últimos días en el país dejaron un claro precedente histórico. No obstante, para el antropólogo lambayecano Pedro Alva Mariñas, esto va mucho más allá y “marca el inicio de un cambio en el Perú”.
Según el especialista, las masivas movilizaciones han demostrado que existe una “reserva moral” en el país y que esta se encuentra vigilante de todo lo que sucede en nuestro territorio.
“Esto marca el inicio de un proceso de cambio. Urge cambios importantes en la conducción del país, en las instituciones públicas. Hay brechas graves que no han sido resueltas a pesar de la bonanza económica y eso lo saben los jóvenes y por ello han marchado”, afirmó.
Asimismo, Alva Mariñas se refirió a la situación de las organizaciones políticas que impulsaron y respaldaron la vacancia presidencial que terminó en un golpe de Estado.
“Los jóvenes han llamado la atención a los otros jóvenes, a los que militan en los partidos políticos en cuestión. Ellos deberán analizar si siguen dedicando su tiempo y su vida a organizaciones con intereses cuestionables”, apuntó.
El antropólogo manifestó que, además, las protestas en las calles notifican que la ciudadanía estará atenta al accionar de las autoridades y que nada de lo que hagan pasará por “paños fríos” porque habrá una respuesta de la sociedad.
“En tiempos de gran incertidumbre, de oscuridades, aparecen estos jóvenes diciendo el país que sí tiene una reserva moral, no solo para resolver los problemas ahora, sino para mirar con optimismo el futuro”, indicó.
Sobre el presidente Francisco Sagasti, Alva Mariñas refirió que su discurso es directo y que tiene una actitud de reencuentro nacional que beneficiará al país; pero, sobre todo, presenta un enfoque moderno que debe resonar con la generación del Bicentenario.
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