El pene es un órgano sumamente valorado por los hombres. Mediante el tamaño de este, históricamente y bajo ideas machistas, se ha calculado la hombría y ‘capacidad’ de darle placer a una mujer. Por otro lado, desde temprana edad algunos adolescentes están midiendo sus miembros y tienen curiosidad de cuál será el tamaño final de este. Con el fin de responder dudas y derribar estereotipos, el doctor Luis Velasco Wilson, especialista en urología, nos da algunos alcances en esta nota.
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El especialista señala que la edad en que inicia el aumento del tamaño del pene es igual a la edad en la que inicia el desarrollo de la persona de sexo masculino y termina cuando concluye el proceso de desarrollo; es decir, se comienza a los 12-13 años y termina a los 18-19 años.
“Es difícil dar un tamaño promedio del pene, ya que en los estudios la persona es la que mide su tamaño y esa medida está supervalorado, pero en los estudios se dice que está entre los 10 y los 14 cm”, señaló el urólogo.
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Por otro lado, el médico Jorge Saldaña señaló que en cuanto a los penes pequeños, estos se empiezan a considerar así cuando poseen menos de 6 cm en grosor de pene cuando está erecto, y que un falo grande se puede considerar cuando cuenta con el tamaño de 15 cm a 20 cm largo y de grosor de 5 cm a 8 cm.
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El sexólogo Christian Martínez indicó, en una anterior oportunidad, a La República que el tamaño del pene no importa. La falsa creencia de que el hombre es el encargado de dar placer a la mujer ha contribuido a esto porque supuestamente una vagina “bien penetrada” va a sentir un orgasmo, al igual que el hombre.
“Si su pareja no siente placer, creen que es un tema de su pene, que no tiene el grosor o tamaño, y comienzan a competir con juguetes sexuales. Por ello, es esencial que hombres y mujeres pasen por un proceso psicoeducativo sexual”, mencionó Martínez.
Sostuvo también que cualquier pene tiene la facilidad de generar satisfacción a una persona con vulva, ya que la vagina se amolda al tamaño del miembro o cualquier cosa que se introduzca.
“No es un tema de grosor, sino de cómo se adapta. Puede generar incomodidad porque no está bien lubricada, no tiene excitación o quizá tiene dolor de algún golpe o ITS”, agregó.
Debido a esto, el terapeuta sexual resaltó que lo más importante durante el coito es buscar un buen movimiento y que cada pareja debe saber qué tipo de acción le genera más placer. “Más que el grosor, es cómo se estimulan las paredes de la vagina”, afirmó.
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El tamaño del pene no es lo importante; sin embargo, las personas con pene pequeño pueden gozar de ciertas ventajas. Los sexólogos Gary Rivera y Christian Martínez nos dan sus opiniones.