Realizar un trío es una experiencia que no todo el mundo se permite; sin embargo, puede resultar una de las más excitantes si es que se hace con una buena organización, ya que conseguir que todos los participantes tengan placer no es nada sencillo.
En el caso de las posturas para dos mujeres y un hombre, deben ser variadas, puesto que, al solo contar con un miembro viril, el encuentro no puede reducirse solo a la penetración, como es de costumbre. Por ello te enseñamos ocho posturas que te pueden ayudar en esta práctica.
Esta postura calza muy bien durante los juegos eróticos, pues las dos miembros del trío le hacen felación al otro. Esta ocasión es ideal también para besarse y entrecruzar sus lenguas, o que una se centre en el pene mientras otra en los testículos.
Doble oral. Foto: MH
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Mientras una hace la típica postura de la vaquera para penetración, otra va a la boca del chico, que está tumbado, para disfrutar de un oral. Es perfecta también para que las dos ‘cowgirls’ se miren frente a frente, para que ambas disfruten con besos y caricias.
Doble vaquera. Foto: MH
Esta se origina de la pose de perrito, pero es una versión más avanzada. Consiste en que se agregue una persona delante de la que está recibiendo la penetración por atrás. La que está en frente también se posiciona en cuatro y recibe sexo oral o es estimulada con los dedos por quien está en la parte posterior.
El tren perritos. Foto: HM
Esta postura es similar a la anterior, pero, para este caso, ya no se coloca en cuatro, sino que se tumba boca arriba y, de esta forma, igual se puede recibir sexo oral.
Perrito deluxe. Foto: HM
Esta posición requiere de mucha organización. Para realizarla, todos deben tumbarse de lado, de modo que alcancen sus genitales para realizar sexo oral entre ellos, uno detrás del otro. Lo único malo es que las diferencias amplias de altura no juegan a favor de esta postura.
Cadena de 69s. Foto: Unsplash
En esta postura, las dos chicas se tumban boca arriba y flexionan las piernas sobre su cuerpo, de modo que el hombre pueda jugar con la apertura vaginal que se ha creado. Esta posición da mucha libertad para que él juegue con la penetración de ambas, ya sea con los dedos, juguetes o su miembro.
Engranaje. Foto: The Hedonistologist
Esta postura es ideal para disfrutar de las caricias y besos. El hombre se tumbará boca arriba en el sillón con las piernas extendidas, otra se coloca delante de él como en cucharita, y la otra se pone delante de ella, de modo que pueda acariciarla, besarla o estimularla como ella quiera por mientras.
El cangrejo. Foto: The Hedonistologist
Esta posición es la variación de la clásica de parados. Una se coloca frente a otra —quien está recibiendo la penetración—, de modo que mientras el hombre la atrae hacia él, ella también puede besar y acariciar a la otra participante.
La unión del lobo. Foto: The Hedonistologist