Octubre fue el mes en el que tuvo más visibilidad el caso Cócteles, seguido contra Keiko Fujimori, el “núcleo duro” de Fuerza Popular y otros dirigentes del partido.
Exactamente hace un año, el 31 de octubre del 2018, el juez Richard Concepción Carhuancho dictaminó prisión preventiva por 36 meses contra la lideresa del partido por sospechas graves de la presunta comisión del delito de lavado de activos.
Eran las 5:30 p.m., cuando el magistrado del Primer Juzgado de Investigación Preparatoria leía el tramo final de su resolución luego de maratónicas audiencias en la Sala Penal Nacional, ubicada en Cercado de Lima.
“Ella tiene una interferencia sobre el sistema de justicia en términos generales y podrían tener impacto en esta investigación porque es sabido que los casos que se ventila en la Sala Penal Nacional podrían llegar a la casasión de la Corte Suprema donde estaba César Hinostroza y revela peligro procesal de la investigada”, sostuvo el juez.
De acuerdo con la justicia, se cumplían con los requisitos para imponer la medida de restricción contra la excongresista y lideresa de Fuerza Popular. Los elementos de convicción presentados por el fiscal José Domingo Pérez fueron suficientes para que se pronuncie la orden de arresto.
Por otra parte, se había acreditado también la intencionalidad de que los recursos legales que interpusiera la hija del exdictador Alberto Fujimori, llegaran a la Sala que integraba César Hinostroza, uno de los líderes de las múltiples esferas que componen “Los Cuellos Blancos del Puerto”.
Para entonces ya se había ventilado también la cadena de favores y distintos brazos que tenía la red delictiva. Ellos también alcanzaban a Fuerza Popular, pues se mencionaba una “fuerza número 1” y una reunión con “la señora K”, hasta ahora no esclarecido.
El panorama posterior fue largo. Mark Vito sollozó al escuchar la resolución de arresto a su esposa Keiko, y esta fue, en primer lugar, trasladada a la carceleta del Poder Judicial.
La investigada pasó entonces aquella noche encerrada en Palacio de Justicia. Entre las 10 a.m. y las 11 a.m., Fujimori fue llevada al lugar donde hasta ahora permanece recluida: el penal Anexo Mujeres de Chorrillos.
Keiko Fujimori fue la primera que tuvo prisión preventiva de los 11 investigados aparte del caso para los que se solicitó la restricción temporal de su libertad.
Según el pedido fiscal inicial, la prisión preventiva también debía alcanzar a:
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Keiko Fujimori cumple un año en prisión preventiva
Segunda Sala de Apelaciones confirmó la prisión preventiva por 36 meses apenas 3 días después de iniciado el 2019. Los fundamentos eran los mismos, haciendo hincapié en el peligro de obstaculización, pero rechazando los chats incluidos de “La Botica”.