AFP y EFE
El gobierno de EEUU ha acusado a la empresa china de telecomunicaciones Huawei de robo de secretos comerciales, así como de mantener negocios ilegales con Corea del Norte y de ayudar a Irán en la vigilancia interna.
Son 16 cargos los que se presentaron a un tribunal en Brooklyn sobre conspiración contra Huawei Technologies y dos de sus filiales por el robo y la violación de la ley de organizaciones corruptas e influenciadas por el crimen organizado. Una de la acusaciones refiere a la apropiación indebida de tecnología avanzada y propiedad intelectual de empresas estadounidenses.
En la obtención ilegal se incluyen "secretos comerciales y material protegido por los derechos de autor, como códigos fuentes y manuales de usuario para enrutadores de internet, tecnología de antenas y tecnología de prueba de robots".
Además, EEUU señaló que Huawei trabaja en proyectos comerciales y tecnológicos en países sujetos a sus sanciones o a las de la ONU, como Corea del Norte e Irán, y ocultan el alcance de estos negocios a través de códigos en sus comunicaciones internas: ‘A9’ y ‘A2’, respectivamente.
En el caso de Irán, explican que la gigante china ayudó al gobierno de este país para la vigilancia nacional a través de la empresa Skycom, una filial no oficial, lo cual intentaron negar los empleados de Huawei.
La empresa señaló a EFE que las acusaciones “carecen de fundamentos”, basadas además de ser un intento para dañar la reputación y negocio de Huawei.
Mark Esper, secretario de Defensa de EEUU, declaró que Huawei es una amenaza para la OTAN, pidiendo a Europa que impida la participación de la empresa en la red 5G.
“Si no entendemos la amenaza y no hacemos algo, al final podría comprometer lo que es la alianza militar más exitosa de la historia, la OTAN”, dijo.