El Movimiento Cannábico Mexicano sembró el último lunes 23 de diciembre una planta de marihuana cerca de las columnas del monumento conocido como el Ángel de la Independencia, en Ciudad de México, en actitud de protesta por las restricciones que aún existen sobre su utilización.
El presidente de la Asociación Mexicana sobre el Estudio de la Cannabis, Leopoldo Rivera, señaló que la siembra significó una forma de protesta pacífica.
A poco de cumplirse los cien años de la prohibición del cultivo de marihuana, los manifestantes pidieron que no se tome como delito la posesión simple de esta hierba, con la finalidad de evitar cualquier posibilidad de detención arbitraria, así como las extorsiones a los consumidores.
Por otro lado, la organización solicitó que la marihuana pueda ser accesible en sus formas natural y derivadas con fines medicinales, y que pueda ser consumida en la vía pública.
Además, escribieron una misiva a Santa Claus, en la que pidieron que se permita la siembra de marihuana para uso personal y no comercial. Asimismo, mostraron su interés por que los consumidores del alucinógeno de la hierba tengan un trato digno, y que no se les criminalice por poseer la droga.
El pedido también se lo dirigieron a los senadores de las Comisiones Unidas de Justicia, Salud y Legislativa Segunda.
El monumento lleva más de un siglo de existencia, pues fue inaugurado en 1910 durante el gobierno del expresidente Porfirio Díaz, por la celebración de los primeros cien años de independencia mexicana.