Subirá el impuesto selectivo al consumo: ¿cómo nos impacta a los peruanos?

El impuesto al pecado o a los vicios como también se le conoce al ISC suele ser muy problemático para los Estados cuando deciden tocarlo, y sobre todo cuando se trata de productos tan populares como la cerveza. A raíz del alza de este tributo anunciado por el Gobierno de Dina Boluarte, y que regirá a partir de marzo, en esta nota le contamos en qué consiste, por qué se aplica, qué productos se están considerando y si le afectará a su bolsillo.

¿Qué es el ISC y cuál es su importancia?

El impuesto selectivo al consumo (ISC) se aplica a ciertos bienes con dos finalidades, señala Miguel Carrillo, abogado tributarista. En un primer caso, grava con una mayor tasa impositiva a los bienes caros, ostentosos, como el oro y las joyas, pues el Estado reconoce que quienes los adquieren tienen una mayor capacidad adquisitiva.

En el segundo caso, se aplica a bienes que pueden generar algún tipo de externalidad negativa en la población. “Por ejemplo, a los bienes que pueden generar un daño a la salud o al medio ambiente. El Estado los grava con una tasa mayor para desincentivar el consumo”, señala Carrillo y agrega que también tiene un fin recaudador.

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¿A qué productos se le aplica y desde cuándo?

En el Perú, el ISC se grava a una veintena de productos como combustibles, agua mineral, gaseosas, entre otros, desde fines de los años 90, precisa el experto a La República.

El Gobierno ha explicado que aunque está en la facultad de ajustar esta tasa cada año en relación a la inflación y otros factores, en los dos últimos años no lo hizo porque el contexto no era favorable, pero ya es el momento. De acuerdo a la resolución ministerial 030-2024-EF, se subirá el ISC a la cerveza, los cigarrillos, el tabaco recalentado y las bebidas alcohólicas como el pisco y el vino a partir del 1 de marzo. El MEF publicará un cronograma para su aplicación gradual.

¿Subirá el precio de todos los productos?

“No. Solo habría un incremento en los productos anunciados, pero que serán moderados (ver infografía). Carrillo sostiene que las familias no tienen por qué preocuparse pues no se afecta a la canasta básica. Un alza del ISC en el combustible sí podría tener una repercusión mayor, pero no es el caso. “Yo creo que el Estado está aprovechando esta coyuntura climática (la ola de calor) para subir la tasa de ciertos bienes que sabe que se van a consumir más pese al incremento del impuesto”, comentó. Por su parte, el ministro Alex Contreras aclaró que ningún producto debería subir de precio ahora pues la medida aún no está vigente y que, de ser el caso, sería especulación.

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¿Cuánto subirán los productos seleccionados?

 El ISC de la cerveza (por litro) pasará de S/2,31 a S/2,51; para los cigarrillos (por stick) pasará de S/0,36 a S/0,37; en el caso del pisco (por litro) irá de S/2,27 a S/2,48. Para otras bebidas también se ha aplicado el incremento dependiendo el grado de alcohol que tienen. Vale precisar que la botella de 620 ml —la más consumida en el país— tendrá un alza menor a los S/0,20.

“Es importante señalar que es decisión del productor transferir la actualización del ISC al consumidor”, ha dicho el MEF. Al respecto, el abogado tributarista explica que en el caso de la cerveza el productor paga este impuesto, y si ve mermada su ganancia, sube su precio al minorista, que hace lo mismo. Entonces el consumidor final sí se ve afectado.

¿Qué impacto se espera con esta medida?

El MEF ha confirmado que busca levantar los ingresos fiscales que en 2023 registraron una caída de 12%, aunque precisa el monto global que espera alcanzar con esta medida. Para el abogado, se está incrementando el ISC para enmendar lo que se va a dejar de recaudar por la prórroga que se otorgó este año a las mypes para hacer la declaración del impuesto a la renta.

Mientras que Phase Consultores señala que en el supuesto que el consumo de la cerveza —cuyo mercado es el mayor entre los bienes seleccionados— se mantenga, la recaudación por esta fuente aumentaría al rededor de S/360 millones (0,036 del PBI), “monto irrelevante” si se busca mejorar los ingresos fiscales.