Estamos advertidos. Al panorama apocalíptico que promete el calentamiento global en un futuro inmediato, se suma una variable que afecta directamente la economía peruana: la desaparición de la anchoveta.
Esto se desprende de la investigación publicada en el último número de la prestigiosa revista Science. El autor es el peruano Renato Salvatecci, ingeniero pesquero de la Universidad Nacional Agraria-La Molina, doctorado en Ciencias Ambientales en la Universidad Paris VI y biólogo pesquero de la Universidad Christian-Albrecht de Kiel, en Alemania.
Así como los paleontólogos deben pasar largas jornadas excavando en busca de fósiles, así también Renato Salvatecci decidió hurgar en las profundidades del mar peruano. Mar adentro halló sedimentos de hace 125 mil años, cuando el planeta sufrió un fenómeno similar al calentamiento que se nos viene.
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“Los paleo-ocenógrafos necesitamos de barcos de expedición científica para poder recolectar las muestras de sedimento, que en algunos casos pueden medir más de 20 metros de longitud. También utilizamos restos de organismos depositados y proxies o indicadores biogeoquímicos para reconstruir la temperatura o la oxigenación de las aguas en el pasado”, explica el científico.
“Empecé este trabajo en el 2014 y lo hemos podido terminar recién el año pasado. Nos tomó mucho tiempo realizar los análisis para reconstruir la temperatura y los indicadores de oxigenación, además de contar e identificar más de cien mil restos de peces”, recuerda.
Consumo masivo. Mayor consumo de anchovetas en el menú diario, propone Salvatecci. Foto: Andina
En la investigación publicada en la revista Science se desprende que el oxígeno es la clave. “Lo que se espera frente a Perú en el futuro no se ha visto en el registro histórico (aguas cálidas y menor oxígeno subsuperficial). Es por eso que tenemos que investigar en el pasado de la Tierra, cuando las condiciones climáticas eran similares. Este periodo que investigamos es el último interglacial (hace 125.000 años). Encontramos que los peces que habitaban la corriente de Humboldt en ese tiempo cálido no eran especies asociadas a un fenómeno El Niño, sino especies de peces muy pequeñas (gobios y peces mesopelágicos) que están preparados para vivir en entornos con bajo oxígeno”.
Salvatecci sabe que el aumento de la temperatura del mar parece irremediable debido al calentamiento global. Lo inmediato, insiste, es controlar la producción de harina de pescado ilegal y, por sobre todo, aumentar el consumo de la anchoveta en nuestro menú diario.
“La industria de harina y aceite de pescado da trabajo a miles de peruanos y brinda divisas para el país. Está muy bien manejada. Pero tenemos que fomentar el consumo directo de anchoveta para crear nuevos mercados y, al mismo tiempo, debería de haber un mayor control para evitar la producción de harina de pescado ilegal”, sostiene.
Lo cierto es que la desaparición temporal de la anchoveta durante los fenómenos El Niño no tiene comparación con lo que sucederá en el futuro, cuando la temperatura sea dos grados más alta de lo normal por el calentamiento global. “Las condiciones que vamos a ver frente a Perú en el futuro no se han visto en el pasado reciente ni a escalas de décadas ni en los últimos 10.000 años -enfatiza Salvatecci- quien ahora está trabajando en el Centro para el Océano y la Sociedad, en la universidad de Kiel, en el proyecto ‘Puntos de inflexión en la corriente de Humboldt’.
Se trata de una investigación internacional que cuenta con la colaboración de instituciones peruanas como el IMARPE. “En este proyecto estamos evaluando los impactos económicos y sociales que un cambio de régimen en la corriente de Humboldt puede traer al Perú”, sostiene.